—Tienes razón—Dijo con simpleza Canadá.—Tal vez deba solo llamarlo por teléfono... Esperaré hasta llegar a España para cargarlo.
El Mexicano que lo esperaba en la cafetería "Waiting..." lo miró sorprendido.
¿Qué lo hizo cambiar de opinión? No se había tardado nada.
"El Canadiense estaba apunto de entrar en la oficina de su padre, sin embargo escuchó... Gemidos... ¿Enserio nunca paran de tener relaciones?."
~๑ೃ࿔.
El británico, luego de terminar de hacer "eso" con cierto francés lo acompañó hacia la salida. Ahora mismo no tenía nada que hacer, así que pensó en llamar a sus hijos.
De milagro recordó que USA lo odiaba, por lo cual solo le quedaba Canadá.
Al llamarlo nadie contestó. Llamó a sus oficinas y contestó su presidente.—yes?— Contestó una voz, seguramente del presidente.
Tuvieron una conversación rápida. En resumidas cuentas el presidente le dijo que se había ido con el mexicano a su país, pero a pesar de eso no sabían su ubicación exacta.
Este no tardo en extrañarse, ¿por qué su hijo se había ido sin decirle? Preguntó si el presidente sabía de alguna forma de contactarlo.
Al presidente solo se le ocurrió una "brillante" idea, ¿España no es padre de México? Tal vez el sepa donde están ahora.
¿No?
Ojalá le caiga un rayo al británico antes de llegar.
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