El mejor amigo de mi hermano. Kookmin.

pt.3

Al parecer a Jimin se le había olvidado cómo respirar, estaba demasiado nervioso como para hacerlo ya que las últimas palabras que le dió su mejor amigo le dieron una idea, la cual intentaba descartar de su mente. Por su lado Jungkook miraba incrédulo la escena, Park Jimin contra su puerta jadeando y con sus regordetas y adorables mejillas coloreadas por un tono carmesí.

—Hey.— Jeon fue el primero en hablar.— ¿Que te trae por aquí, bebé?

Jimin frunció su ceño, aún le molestaba como el menor lo llamaba bebé a pesar de que era mayor.— Tú hermano me trajo hasta acá en contra de mi voluntad.— Mencionó con un tierno puchero el cuál Jeon no dudó en besar sorprendiendo así al más bajo.

—Perdón Jimin, pero teniéndote en mi habitación así de tierno es imposible no tomarte aún teniendo a Nam en la habitación de a lado.— Fueron aquellas las últimas palabras coherentes que se escucharon en la habitación del menor.

En unos momentos el peli rosa estaba estampado contra la pared mientras sus labios eran devorados por Jungkook, que al separarse quedó orgulloso de él caliente aspecto que había provocado en el más bajo. Sus mejillas de nuevo estaban rojas, cabello desordenado y sus labios estaban rojizos y un poco hinchados debido a los besos anteriores.

Aprovechando su fuerza cargo a el más pequeño por sus piernas llevándolo directo a su cama, comenzó de nuevo un caliente beso mientras que sus manos no se quedaban quietas. No se había dado cuenta en que momento los dos chicos habían quedado completamente desnudos, aunque eso no era lo primordial en ese momento. Sus manos no se quedaban quitas, jugaban con las nalgas del más bajo arrancandole así varios gemidos que eran ahogados por los labios de Jeon que lo mantenían un poco ocupado.

Después de sentirse mínimamente satisfecho de sus labios prosiguió dejando un camino de besos desde su mejilla hasta su cuello dejando ahí algunas cuántas marcas que se crearían más tarde. Bajó hasta los pezones del chico que de encontraba bajo él, los lamió mordió y jugó un poco con ellos siendo música para sus oídos los jadeos que Jimin soltaba, los cuales trataba de callar con su propia mano.

Se había dicho a si mismo que así estaba bien así que prosiguió por dejar algunas marcas en la zona del abdomen bajo del mayor. Hizo de igual manera con sus muslos y piernas quedando así totalmente rojas. El impaciente chico llamado Jimin por fin habló.

—Apurate Jeon, por favor...— Rogaba aquel peli rosa impaciente por sentir a su pequeño dongsaeng dentro de sí mismo.

Sin lubricante ni preparaciones Jungkook fue introduciéndose por las paredes anales de su hyung, el cuál sólo gemía en respuesta. Había escuchado como soltaba maldiciones y era lo que esperaba, no estaba siendo delicado cómo se lo había propuesto en un principio.

—E-eres un bruto, J-jung- ¡ah!— Park ni si quiera podía terminar aquella frase, el castaño había dado en su punto dulce ocasionando esta vez un inesperado grito del cual se arrepintió momentos después tapando su boca con sus propias manos.

Al menor le era imposible no soltar algunos jadeos e incluso gemidos al sentir como su miembro estába siendo apretado por la entrada de su mayor, sostenía la cintura del contrario haciéndose espacio aún más profundo golpeando una y otra vez aquel punto que hacía al mayor querer llorar. Y fue así, no sabía en qué momento comenzó a sentir sus mejillas húmedas debido a lagrimas escurridizas que lograron escapar.

Jungkook limpió su rostro de manera dulce comenzando a sentir aquel ya reconocido cosquilleo en la zona baja de su abdomen, estaba cerca de llegar al clímax y quería hacerlo junto a su hyung. Por lo que tomó el negro del más pequeño de estatura y comenzó a masturbarlo. Una vez que sintió como ambos cuerpos eran manchado por una tiras de semen el se dejó liberar dentro de él mayor quedando encima de él por unos momentos. Una vez sus respiraciones se calmaron, Jeon salió de su interior y se recostó a un lado, Park por su lado lo miraba con cierto enfado.

—¿Que hice para que mi bebé me vea así?— Preguntó el castaño haciendo un berrinche.

—Dejarme con el culo adolorido.— Dicho esto, Jimi se hecho a sus brazos, no sin antes limpiar su cuerpo y el del menor con unas toallas húmedas para bebé que se encontraban en la habitación.

—Por si no quedó claro, me gustas, Jiminnie.— Habló Jungkook con un pequeño mochi entre sus brazos.

—Por si no quedó claro, tú igual me gustas, Jungkookie.— El mayor levantó su rostro para dejar un casto beso en los labios del menor antes de caer dormido.
.
.
.
.
.
.
.
—Obtuve una buena porno.— Pensó Namjoon al ya no escuchar nada en la habitación de su hermano menor.

-----------------------------------------------------------------------------------

Después de mil siglos, aquí estoy, perdón por tardar tanto y por lo feo que redacté, es el primer Smut que hago y eso blabla.

Tal vez luego hago algo equis por aquí, y gracias;;💓