¡A La Chingada!

20

---Amor, no...--- dije entre besos ---¿No quieres?--- se detubo unos segundos y me miró ---N-no quiero que la primera vez sea así, no sabes cuanto me muero por arrancarte lo que traes puesto y hacertelo aquí mismo, p-pero no puedo...--- mi bebé sonrió y dejó un besito casto en mi nariz

Bajó de mi cuerpo y se sentó en un sillón, palmeó el aciento a su lado ---Ven, sientate--- obedecí ---Tienes razón Tahi, también me muero de ganas, pero igual quiero que sea especial y no.. por calentura--- sus cachetitos se pusieron aún más rojos

Había comenzado la hora buchona y cómo buen chilango me paré a bailar con mi bebé ---NO TE CONTARON MAAAAL--- mi bebé y yo cantabamos a todo pulmón mientras bailabamos, lo tomé de la cintura y dimos una vuelta ---¿Viste ese niño? Que pedo con su ropa wey, se ve como puta--- besé a mi bebé, tenía que distraerlo de aquel comentario ---¡Que asco! ¡Si era maricón!--- tapé los oidos de mi niño y pegué nuestras frentes rogandole a yisus que no escuchara aquello ---¿Y a tí que te importa perra? ¿Lo mantienes o qué chingados?--- sin retirar las manos de los oidos de mi bebé busqué a la dueña de aquella voz, era una chica jirafona, peliroja y de cabello chino, me miró y le sonreí

---Tahi, ¿Pasa algo?--- me volví a mi novio y le regalé una sonrisa, bajé mis manos a su cadera ---Nop, ya todo está bien--- me sonrió enseñandome sus lindas encias ---¿Tienes hambre? conozco unos buenos tacos por aquí--- no mames, la pregunta ofende, acentí ---Iré por Diego---

Mi bombón volvió con un Ozuna bien pinche pedote
---¿¡Qué tanto tomaste Diego Ortega!?--- ibamos para la perra puerta con el Ozuna casí muerto ---Sunas cuntas cervazas---- madres wey, no entendí ni madres, salimos de la casa y en las escaleras de afuera estaba la morra peliroja, bajamos esas madres casí dejando manco al Ozuna ---¿Dóndestamos?--- mi bebé le torció los ojos al wero, la morra y yo nos volteamos a ver
---Gracias--- le susurré, acintió dejando salir humo de su boca, estaba fumando

---¡Salen seis de pastor!--- DAMEEEE ---¿Porqué le agradeciste a Modesto?--- ká? ---¿Modesto?--- mi bebé rió ---A la peliroja alta que estaba en la escalera--- JAJA NOMAMES MODESTO (así se llama la jirafa del parque de Oaxaca) ---Ahh... por nada--- me miró con su carita hermosa de 'neta wey?' ---Tahi...--- los tacos llegaron a mi ---¡Tacos!--- me los tragué en chinga

Llegamos al edificio después de los mejores putos tacos de mi perra vida ---¡Amáaaa ya lleguéeee!--- el Ozuna se puso a gritar como vieja loca ---¡Callate wey! ¡Nos van a cachar!--- las posibilidades de que esto saliera mal eran 100% sobre 100% ---¡Chamacos! ¡¿Dónde andaban hijos del maíz!?--- a la chingada

Tres minutos después estabamos como el perro arrepentido con el rabo entre las patas ---¡Cuahutémoc López! ¿¡Dónde andabas!?--- el Ozuna ya estaba en el cuarto despues de unos buenos vergazos, digo regaños y ahora nos tocaba a nosotros ---¿¡Porqué traes un chupetón en el cuello!? ¡Te voy a quemar las patas!--- madres wey, aAAAA CARAY YO NO LE MORDÍ EL CUELLO ---¡Es verdad! ¿¡Porqué traes un chupetón en el cuello!?--- mi papásuegro y yo lo miramos con el ceño fruncido y los brazos crusados

---¡Diego me modrió, me dijo que lo bajara y me mordió!--- bueeeeno, más te vale ---Más te vale Temistócles--- mi papásuegro lo miró con los ojos entrecerrados

---¿Ya vas a decirme porqué le agradeciste a
Modesto?--- kejesooo ---¿Quién?--- me dió un golpesiro en el pecho ---¡Tu sabes quién Aristóteles Córcega!--- me sobé dramáticamente ---Bueno pero no te enojes--- rió y me aserqué a darle un besito, pero él dió un paso atrás ---No besos hasta que me digas--- hice un puchero ---¡Eso no es justo! ¿Cómo voy a hacerte el amor?--- mi bebé se puso todo rojito ---No lo harás, no hasta que me cuentes--- mordí mi labio y solté un suspiro ---Bien... la agradecí por callar a unas morras pendejas que estaban... diciendo cosas--- mi bebé frunció el ceño algo cunjundido ---¿Qué cosas?--- madreeeees ---Cosas... sobre ti--- mi bebé relajó su expresión y se sentó en su cama ---¿Sobre mi?--- acentí ---Sobre tu ropa...--- murmuré mi bebé se miró a sí mismo y su expresión se deformó a una triste ---Te ves hermoso--- admití con algo de verguenza ---No miré a nadie más porque yo sólo te amo a ti, yo sólo te deseo a ti--- admití, él me miró ---¿E-encerio?--- su voz se oía cortada, tomé su carita y lo besé

Su sabor dulce a miel de hot cake se mezclo con algunas lagrmias saldas ---Jurame que nunca volverás a llorar por la opinión de alguien más sobre ti,
okey?--- acintió y sorbió su naricita, entrelazamos nuestros meñiques y sonreimos

Nos acostamos de frente en su camita y entrelazamos nuestras manos ---Te amo Aristóteles--- su voz era un poquito ronca, sonreí ---Yo también te amo--- dí un besito en su naricita ---Ari...--- yo estaba muy cansado, casi dormido ---Qué pasa?--- cerré los ojos ---A-ari... hagamos el amor--- abrí los ojos y encontré su carita roja, sus labios entre abiertos y su repiración irregular

Lo besé quedito, con muchísimo cuidado, moví mis labios a un compás suave y lento, mi bebé hacía lo mismo, me mordió y abrí la boca él metió su lengua y yo tomé su cintura su piel se erizo a mi tacto, su playera estaba un desordenada, se la quité y la aventé por ahí, él intentaba taparse con la cobija ---No...--- tomé sus manitas y dejé un besito casto en ellas, retiré poco a poco la cobija y pude ver su abdomen y su pecho, su preciosa cintura ---Eres precioso--- susurré en su oido y comenzé a besar su cuello ---Ari.. a-ah--- soltó bajito, mordí su cuello sin mucha fuerza
---Mhm...--- mi niño soltaba largos supiros, con mis manos recorrí su espalda hasta llegar a la cremallera de su short ---¡ARISTEMO!--- ¡A LA CHINGADA!

Disculpen la tardanza. Love, Neyrun