Porno para el Alma

Porno o no porno, esa es la cuestión.

¿Musa estás ahí?

<< No, me mudé de cerebro. Claro que estoy ¿dónde voy a estar? >>

Quiero hablar de algo.

<< ¿Qué pasa ahora? >>

Hace un tiempo he estado dándole vueltas a cierto cuestionamiento. 

<<Uuuy, algo me dice que esto va a ser largo. A ver ¿qué cuestionamiento es ese?>>

¿Será porno lo que escribo?

<< ¿Eh? >>

Más de una persona lo cree así. Me han dicho que mis relatos llegan a ser pornográficos debido al nivel de descripción y lo explícito de las escenas. Otros lectores, sin embargo, piensan diferente y no están de acuerdo en colgarle esta etiqueta, argumentando que sería despectivo catalogarlos de esa manera.

La dualidad de criterio me puso a reflexionar, y después de haberlo pensado en profundidad, creo haber encontrado la respuesta correcta a la polémica.

<< Ah bueno, si ya tienes la respuesta y todo, menos mal. (Por un momento me asusté, pensé que se extendería) >>

Ambas partes tienen razón.

      << ¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿?????!!!!!>>

Pues sí, ninguna se equivoca.

<< Puff, que locura, no entiendo nada.
¿Escribes porno finalmente o no? >>

Veamos que dice la definición de pornografía.

Pornografía: El término hace referencia a todo aquel material que representa actos sexuales o actos eróticos con el fin de provocar la excitación sexual del receptor.

No hay duda, sí lo hago, aunque la manera correcta de llamarlo es porno literario.

<< ¿Porno literario? ¿Es un género o te lo acabas de inventar? >>

No me invento nada, existe, está reconocido y no es nada nuevo. En realidad es un subgénero de la literatura erótica, sin embargo hay claras diferencias.

Te explicaré brevemente qué es el porno literario y qué lo difiere de la literatura erótica regular.

Los libros pertenecientes al género erótico son aquellos que narran una historia, esta suele ser mucho más sutil y sugerida y las escenas sexuales son limitadas.
La literatura pornográfica suele carecer de una trama complicada, esta resulta casi inexistente, además de que la acción está centrada en el acto sexual y la narración de este suele ser detallada y descriptiva.
En suma, la literatura pornográfica es considerablemente explícita y tales escenas son abundantes a lo largo de los textos.

<< mmmm... interesante, pero para entenderlo bien ¿podrías ponerme un ejemplo de ambos? >>

Cómo no, te pondré uno fácil.
Los libros del Marques de Sade, porno (y más).
50 Sombras de Grey, erótico.

<< ¡Oh, ahora sí me ha quedado claro! >>

Ves, son muy distintos, y si todavía quedaba alguna duda respecto a mí acaba de esfumarse. Lo puedo decir con seguridad, estos cuentos que escribo son literatura pornográfica.

<< ¿Entonces, ya no es despectivo decir que escribes porno? >>

Depende, en parte lo sigue siendo ... pero sólo cuando no se es consciente de la diferencia entre el porno cinematográfico y el porno literario, y esta es abismal.