Sebastian

Ojos negros

Grité junto con todos los alumnos del internado cuando los de nuestro equipo marcaban otra anotación, no conocía a ninguno de los chicos así que no miraba a nadie en específico, sin embargo el hermano de Timmy era el mejor escudo protector del mundo

-Tu hermano es grandioso - Grité para que Timmy me oyera con claridad sobre los constantes gritos y cantos que habían en la gradas

-Yo también soy grandioso - dijo él con una ligera sonrisa traviesa, yo sólo conseguí reírme a carcajadas y sentarme de nuevo en las gradas. Sebastian llegó sentándose a mi lado con las cosas que le había pedido en las manos, tomé una bolsa de las patatas y la abrí

-¿De qué me perdí? - Gritó

-ANOTAMOS - Sebastian sólo negó con la cabeza sonriendo, supongo arrepentido de haber ido a buscar mis pedidos y haberse perdido la jugada, Eric pronto llegó haciéndonos arrimar hacía la barra a Sebastian y a mi, quedé atrapada entre Timmy y el pato en un cerrar de ojos - DAME MI REFRESCO - pedí a Eric después de sentir la boca seca por las patatas saladas

...

Oía gritos, trompetas y veía los bailes tontos que hacían los de nuestro equipo, pero a pesar de la alegría y la emoción, me sentí desesperarada al perderme entre el montón de personas de nuestro internado y el otro

-Maldición - mi refresco nuevo se había hechado a perder cayendo al suelo cuando de pronto alguien me empujó por la espalda, voltee en busca del culpable, pero todos estaban gritando eufóricos por nuestra victoria en uno de los primeros juegos  del campeonato, busqué al alguien conocido con la mirada - rayos - dije rindiendome en territorio desconocido ¿en que momento se me habían perdido? Me alegre un poco al ver una cabellera dorada caminar hacia la salida, tiré el vaso vacío al suelo y Corrí hacía Angus quitando a todas las personas que se interponian en mi camino

-ANGUS! - Exclamé, el muy idiota parecía ser sordo -ANGUS - empujé a un extraño haciendo que éste cayera en el pecho de una chica... Voluptuosa

-IMBÉCIL ES MI NOVIA - El chico de cabellos negros estampó su puño contra la mejilla del chico al que había empujado cayendo de espaldas en el suelo justo frente a mi... Mierda, el chico se levantó del suelo y le devolvió el puñetaso al chico moreno en el estómago, la chica algo desesperada tomó a su novio entre brazos e intentó calmarlo, sin embargo el mismo moreno desconocido se abalanzó al chico al que yo había empujado para golpearlo en el suelo... De un momento a otro todo el mundo estaba peleando con todo el mundo sólo por un empujón, busqué de nuevo a Angus con la mirada, había desaparecido, mi mejilla se encendió en ardor mientras estaba de nuevo en busca de alguien conocido, un chico de ojos claros estaba frente a mi

-OH DIOS MIO SANTÍSIMO -

-MALDICIÓN - Sentí un enorme dolor dentro de mi mejilla y en la encía bajo ella - HIJO DE PUTA - Puse mi mano en mi mejilla buscando socorro

-Oye lo siento mucho - el chico se acercó a mi ocultando con fuerzas su risa burlona - estabas medio atravesada ¿no crees? - Imbécil

-Estaba buscando a alguien - aparté los brazos del chico que intentaban calmarme para ir de nuevo en mi búsqueda... Ninguno de esos cuatro idiotas sabían cuidar a alguien, se supone, según las pocas novelas que había leído, que los chicos siempre cuidaban a las chicas, ahora estaba parada como una estúpida en medio de una tremenda pelea con un chico tratando de no reírse de mi

-¿De qué internado eres? - Preguntó

- Town Vine - él sonrió

-Yo también... Puedo acompañarte a tu autobús