Alcanzando metas

Capítulo 148

Narra Lore

Víspera de Semana Santa, en la uni tenemos mini vacaciones antes del último mes del curso para acto seguido los finales. _____ se marcha para Niza el lunes, por lo que me quedaré sola toda la semana. Lo que me preocupaba de todo este asunto tiene nombre, Tom, si se van todos intuyo que él también se irá, y lo que más me preocupa es que tenga otra bronca con su madre. ¿Qué hago para ayudarlo? Sólo se me ocurre pedirle ayuda a Martine, ahora ¿cómo hago para no decírselo todo? Buena pregunta. Mi madre me mandó a echar la basura y a buscar el pan, estaba casi llegando de vuelta cuando me encontré con Martine.

Lore: hola-la saludé antes de que entrara en casa

Martine: ay hola, no te había visto

Lore: ya vi ya. ¿Cómo va todo?

Martine: como siempre, aquí vamos. ¿Y tú? ¿Qué tal en la universidad?

Lore: va muy bien, gracias por preguntar. Esto, ¿os vais todos para Niza?

Martine: sí, los cuatro

Lore: necesito pedirte un favor

Martine: dime

Lore: prométeme que cuidarás mucho a Tom, por favor. Me quedaré más tranquila sabiendo que estará con vosotros

Martine: según me dio a entender se quedará con nosotros, si es por eso puedes quedarte tranquila y sí, tienes mi palabra de que lo cuidaré

Lore: lo sé, sé que es como tu hijo

Martine: mi hijo mayor-riendo-es de mi familia

Lore: se nota. Gracias-me salió abrazarla-gracias otra vez

Martine: ¿estás bien? ¿Os pasó algo?

Lore: no, nada

Martine: ¿segura?

Lore: ssi

Martine: ¿vale?

Lore: casi que me voy yendo, y de nuevo gracias

Esto último ha sido muy raro pero ya puedo suspirar aliviada, no sabe el peso que me quita de encima. Por la tarde _____ anduvo a su aire y a la hora de cenar se marchó diciendo que se iba para casa de Lucía, quien la entiende. Al poco rato llegó Alba, lista para salir de fiesta.

Alba: ¿aún estás así? Venga cámbiate

Lore: otra igual, ¿qué más os da que vaya en leggins?

Alba: no, no. Tú elegante, que tienes que ligar

Lore: no quiero ligar con nadie-básicamente porque el que me interesa pasa olímpicamente de mí

Alba: la noche está para un reggaetón lento-la miré sin entender- la noche es joven, quien sabe. Y venga, que llegamos tarde

Tuvo suerte de que me duchara por la mañana, porque sabía que vendría para cenar y no quise hacerla esperar sino ahora la tendría llamando en la puerta del baño hasta hacerme salir. Cenamos algo mientras mi abuela se dedicó a contarnos sus juergas de cuando era más joven, vamos que le va la marcha aunque no lo diga. Llegamos a la zona de la fiesta con tiempo de sobra.

Lore: ¿ves cómo llegábamos perfectamente?

Alba: hay que coger sitio

Lore: si tú lo dices

La música fue disminuyendo, salieron los cantantes de la orquesta al ritmo de cumbia, haciendo que nos moviéramos poco a poco. Todo iba tranquilo, hasta que el cantante, que por cierto se me hacía la cara conocida presenta la siguiente canción.