Crucé el patio con La lluvia cayendo por mi cuerpo. Mi única escapatoria fue entrar a la casa y quitarme la chaqueta. Las gotitas de agua que caían del cielo eran perfectas para lograr engañar a las lágrimas que caían de mis ojos. Seguía Sin Poder Creerlo, Y Sin Poder Creer También lo Que me dijeron de Roger...En fin... Subí a mi habitación, y la puerta de en frente al fin estaba abierta. Había una maleta sobre la cama y un estuche parecido al de una guitarra. Una guitarra muy larga, para ser sincera.
Dejé todo como estaba y entré a mi habitación. Me puse a buscar no sé qué cosa en uno de mis cajones y encontré una de las tantas fotos que Harry y yo Teníamos juntos. No dudé ni un minuto en hacerla pedacitos y tirarla al cesto de la basura.Sequé mi cabello y me cambié de ropa por mi pijama. Bajé a la sala y encendí la televisión mientras tomaba mi café. La lluvia golpeaba las ventanas, ese sonido me relaja mucho. Encontré Mi Primer Beso En La Televisión, una de mis películas favoritas. Me acurruque bien en el sillón, me coloqué mi manta Favorita encima y continúe viendo la película.
El reloj timbró cuando dieron las Doce, al mismo tiempo que alguien entró en la casa. Sabía de quienes se trataba, así que decidí Solamente cerrar los ojos, no quiero verlos después de saber que me fui del concierto otra vez.
—Mírala... Luce Tan Linda...
—Roger, Déjala dormir...
—Sshhh! Cállate, Brian! — Logré sentir su peso junto a mi en el sillón, y entre abrí los ojos un poco para ver a Roger. —Hola, Princesa... —Le sonreí, después de todo, el sueño ya estaba llegando a mi. —Ven, te llevaré a dormir.
Me Levantó Del sofá, Pero Sentí Mucho Frío al Instante. —T-tengo frío..
Roger Me tocó la frente, y sentí su mano helada por completo. —Tienes Temperatura. Saliste cuando estaba Lloviendo, ¿Verdad? — No tuve Más remedio que Decir que sí. —Bien, Ahora... — Se giró hacia alguien, Un alguien muy parecido a Freddie. —¿Puedes Traerme un Paño y agua fría?
Ese alguien asintió y corrió a la cocina encendiendo todas las luces. Parece una chica... Tiene el cabello más largo que Freddie.
Roger me siguió cargando hasta mi habitación y me dejó sobre la cama, no sin antes quitarme las mantas de encima Junto con los calcetines—M-me recuerdas a mamá...
—Roger, Aquí tienes el Agua... — El Alguien entró en mi habitación y le dió a Roger las cosas que le había pedido. Pude jurar que escuché salir de su voz una expresión de sorpresa. Pero no lo sabía, mis ojos nunca se abrieron.
—Gracias, Amigo. — Roger mojó el paño y lo puso sobre mi frente. —Me quedaré Contigo, ¿Bien? Puedes Dormir Tranquila.
Negué al Instante. —E-estoy bien... Ve a descansar...
—Nada De eso. — Me Acarició La Mejilla. —Duerme, Linda, Me quedaré Aquí contigo.
Le sonreí, me levanté sobre los codos y le di un beso en la mejilla. —Gracias, Roger.
Sus mejillas se pusieron rojas por completo, pero también me sonrió.