Sara
Estaba en el aeropuerto con una maleta y una mochila de mano, después de todo es bueno viajar lijero. Junto a mi estaba Jordan con 3 maletas y una mochila igual a la mía. Sofia también estaba aquí, ella también iría con nosotros.
— ¿A que hora llega el Jet? —preguntó Jordan.
— ¿Iremos en Jet? — pregunte.
— Si — dijo Neythan detrás de mi — Ya se que no te gusta, pero no hay otra opción, eran tres y su seguridad es importante.
— En los vuelos comerciales hay mucha seguridad. Además somos poquitos es solo un desperdicio.
— Te aguantas — dijo Neythan.
(...)
Después de 16 horas de vuelo llegamos a Italia, nos fuimos a un hotel cercano a la manada del Rey. Estábamos acomodandonos cuando alguien toca la puerta, yo voy a abrir.
— Buena tarde, mi Ipso — el chico hizo una reverencia. — Espero tenga una buena estancia aquí, he sido mandado por el Rey para solicitar su presencia hoy mismo en el castillo.
— Gracias, joven...
— Piura, ese es mi nombre.
— El mio es Sara, un gusto — estrechamos la mano en forma de saludo.
— Mi Ipso, la está esperando la guardia Real.
— ¿Ahorita vamos a ir? — el asintió en forma de respuesta. Volteé a ver a Sofía y Jordan, me acerque a ellos — Sofía acompañame. — despues voltee a ver a Jordan — Cariño, no me puedes acompañar, perdón, te veo en un rato más.
Salimos del hotel, en la entrada se podía ver una limusina junto a dos camionetas negras, al acercarnos dos hombres enormes nos abrieron las puertas, por obvias razones entramos al vehículo.
— ¿Qué es lo que sucede en el reino? ¿Pará qué me llamaron?
— No estoy en posición de hablar, disculpeme, mi Ipso.
— Puedes llamarme Sara.
— Perdoneme, no estoy autorizado para eso, mi Ipso.
— Piura... ¿Puedo llamarte así? —con esta gente no se sabe lo que puedes hacer o no.
— Como guste, mi Ipso.
— Ok, Piura.
— Mi Ipso, hemos llegado a palacio — el lugar desde la ventana era enorme y bonito, el lugar desbordaba porte y elegancia.
El hermoso bosque contrastaba con el lugar, que estaba rodeado por un muro de piedra y rejas. Cuando el auto se detuvo frente a la puerta no pude evitar ver los detalles del lugar.
— Sigame — dijo Piura mientras se adentraba al lugar. En un punto llegamos a una sala donde estaban algunas personas, en el centro pegado a la pared estaba en el trono sentado el rey, que no aparentaba más de 25.
— Buena noche — salude. Todos allí voltearon a vernos e hicieron una reverencia.
— Ipso — dijo el rey llamando mi atención.
— Dígame, rey— conteste de manera que el sonrió.
— La hemos mandado a traer por dos asuntos.
— ¿Cuáles son? — pregunte impaciente.
— Necesitamos que nos ayude a encontrar a una persona que arriesga nuestra seguridad.
— Ok — dije mientras a sentía, ¿por qué llamarían a una Ipso para algo tan simple? — ¿Y la otra?
— Bueno, a mi edad no he encontrado a mi mate y no hay esperanza a que la encuentre, así que decidí casarme con alguien más. — hizo una pausa — Usted es la más indicada para tomar el puesto de reina, ya que tengo entendido que usted rechazo a su mate y....
— Me niego a casarme con usted — dije firme, a lo que el rey sonrió y las personas a mi lado se quedaron boca abiertas. — Disculpe, pero no puedo, la diosa Luna no lo aceptaría.
— Excelente — sonrió aun más el rey, cuando explicaba la situación se miraba algo triste. — ¿Puede darme un poco de tiempo a solas?
— Si — se levanto de su trono y me llevo a un cuarto cerca de la sala donde estabamos.
— Tome — me entrego una carpeta — gracias por rechazar el puesto de reina — sonrió aun más — me ha salvado, tendré más tiempo para encontrar a mi verdadera Luna. —miro hacia arriba con ensoñación — estos papeles son las únicas cosas que pueden ayudarte a encontrar al sujeto que necesitamos que encuentres. — su voz y mirada cambiaron a una más seria — Empezarás con esto lo más pronto posible, te acompañará mi hermano Piura.
— Esta bien, rey.
— El plan es que vayas a la universidad cercana al Reino, localices a este presunto sujeto, lo detengas y lo entregues a la manada.
— ¿Qué hizo para que el reino lo busque así?
— Ha asesinado a dos consejeros y se dice que va por el tercero.
— De acuerdo — suspire — tengo una pregunta.
— Digala.
— No tiene nada que ver con este asunto — él asintió, pensé mis palabras, la pregunta no debería de ser directa y ahora que lo pienso ¿por qué preguntaría por Katie?, después de todo ella ya no pertenece a esta manada — ¿Sabe que una mujer de aquí es luna de la manda Winther? O mejor ¿por qué no han dado información sobre ustedes desde hace tiempo?
— Fueron dos preguntas, pero bueno — Suspiró — ¿Katie es feliz?
— Si, si lo es. — no dejo de mover la cabeza de arriba a abajo, después sonrió.
— Es muy bueno. Con respecto a la segunda pregunta, si hemos estado presentes en todo momento, y hemos tenido contacto con todas las manadas.
No se si creele, pero si lo está asegurando tal vez solo sea cosa mía. Yo asentí y deje pasar el tema.
— Gracias por responder, ahora paso a retirarme — me levante de la silla y fui directo a la sala.
En el camino me encontré con un hombre de ojos verdes y cabello castaño, que al mirarme se acerco más a mi, yo no me aleje y queriendo seguir mi camino topo con él.
— Hola, hija... — dijo el sujeto, yo lo miro seria.
Hola he vuelto jaja. Espero que disfruten del capítulo, tarde en publicarlo porque estoy de vacaciones y pues eso nomas.
![](https://img.wattpad.com/cover/165791915-288-k244768.jpg)
KAMU SEDANG MEMBACA
Eres Mia
Manusia SerigalaLos ojos verdes de la castaña se posaron en aquel tipo al cual ella estaba destinada a amar. Una historia mas de un romance.