23

1.9K 313 119
                                    







—Jeonginnie.

—¿Qué?

—¿Estás bien?

—Por supuesto que estoy bien —el libro que Jeongin estaba metiendo en el librero de la biblioteca golpeó la pared debido a la fuerza que había usado el chico—. ¿Por qué no estaría bien?

—Por que Chan– 

—¿Por qué terminé con ese idiota que al parecer se estaba acostando con ese oso de mierda? —Jeongin lo miró con una sonrisa tensa—. Chan no me mereces, soy demasiado para él, así que yo terminé con él.

Felix se quedó en silencio un momento, observando el rostro ojeroso de su amigo, para luego mirar hacia atrás, viendo llegar a Seungmin.

Seungmin le hizo un gesto extraño que no pudo entender bien.

—Jeonginnie ¿No quieres llorar?             —pregunto Seungmin calmado.

El menor de los tres se detuvo y sus labios temblaron. Felix dió un paso, dispuesto a sostenerlo cuando se derrumbara.

Sin embargo, Jeongin se limitó a frotar sus ojos furiosamente.  

—Chan no merece mis lágrimas —Se limitó a decir.

Felix y Seungmin se miraron de forma cómplice.

—Esta bien que llores, Jeonginnie —señalo Felix.

Lloraría si supiera que el término le dolió tanto a Chan como a mí —dijo Jeongin—. Pero lo veo muy bien hablando con su novio.

Los dos chicos se giraron hacia la dirección en la que Jeongin apuntaba, viendo a Chan sentado detrás de una mesa, con Woojin a su lado, hablando en voz baja, ajenos al resto.

—Seungmin, agárrame la camisa —El castaño rodó los ojos ante la petición de Felix, pero obedeció—.
¡SUÉLTAME QUE YO LOS MATO!

Su grito resonó en toda la silenciosa biblioteca, llamando la atención.

Chan levantó la vista, palideciendo, en tonto Woojin se ruborizaba.

—¡¿ME OYEN, MALDITOS TRAIDORES!? —siguió gritando Felix mientras Seungmin fingía sostenerlo para detener sus pasos—. ¡SON UNOS SUCIOS, SON LOS PEORES AMIGOS DEL MUNDO, PUEDEN IRSE AL DIABLO AHORA MISMO! —Seungmin lo soltó en el momento en que dos guardias llegaron, agarrando a Felix de los brazos para sacarlo—. ¡CUANDO LOS VUELVA A VER LES CORTARÉ EL PENE A LOS DOS, ¿LO TIENEN CLARO?!

Los tres amigos fueron expulsados de la biblioteca gracias a eso, por supuesto.

Seungmin suspiró mientras caminaba por los pasillos, con un silencioso Jeongin a su lado mientras Felix seguía despotricando. 

—¿Piensas hablar con Chan más adelante? —preguntó Seungmin frunciendo el ceño.

—No lo sé —Jeongin se encogió de hombros—. Sí lix te mintiera, ¿querrías volver a hablar con él?

Felix se quedó en silencio de pronto.

—Depende qué tipo de mentira estamos hablando —respondió Seungmin con su estómago revuelto.

—Oh, claro —Jeongin mordió su labio inferior—. Pero, ¿si para ti fuera algo imperdonable?

¿Cómo que me ocultara cosas de su familia? ¿Cómo que no me diga de dónde salió realmente? ¿Qué no me diga quién es?

—Yo te perdonaría todo, Seungmin —dijo de pronto Felix con la voz temblando.

Seungmin lo miró, deteniendo su caminata.

—Por supuesto que yo igual lo haría Felix —respondio Seungmin con voz grave—, pero que te perdone no significa que las cosas sigan iguales.

Felix enmudeció.

Hubo un pequeño silenció.

—¿Por qué hablan como si fueran a terminar? —regaño Jeongin tratando de que el aire tenso desapareciera—. Vamos estoy desanimado y quiero comer como el cerdito bonito que soy.

Seungmin rodó los ojos otra vez, volviendo a caminar.

—Vamos, cerdito volador, los invito a comer una pizza —dijo Seungmin.

En lo único que podía pensar Felix era en pedir perdón.

Pero las palabras no salieron nunca de su boca.





















Gracias por leer

𝙉𝙤𝙫𝙞𝙤 𝙙𝙚 𝙖𝙡𝙦𝙪𝙞𝙡𝙚𝙧 - 𝙎𝙚𝙪𝙣𝙜𝙡𝙞𝙭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora