NO VALES NADA

Mi primera vez

Cómo toda adolescente de mi edad, soñaba con una primera vez de sueños, a la luz de la velas, tenía expectativas altas inclusive del chico con quien estaría en ese momento, pero las cosas pasaron tan repentinamente que aquella primera vez mágica se convirtió en lo siguiente.

Todos estábamos muy borrachos, no teníamos consciencia de lo que hacíamos, ni mucho menos teníamos noción del tiempo, ya era casi media noche, pero eso no importo, bueno.

César comenzó a besarme lentamente y luego la intensidad fue aumentando, yo no lo paré, me levanto con la mano la falda que llevaba y bajo presurosamente mi ropa interior, yo estaba demasiado excitada, mi respiración era cada vez más rápida, gemía despacio y deseosa de que me penetrara, introdujo sus dedos en mi boca, yo chupe cada uno de ellos como si fuesen caramelos, para luego césar introducirlos lentamente en mi parte intima, lo hacía lento y yo lo estaba disfrutando, pero de la nada ese chico dulce que me trataba con delicadeza empezó a penetrar su dedos forzosamente, deje de disfrutarlo, me estaba lastimando, sentía como si me desgarraran por dentro, se desabrocho su pantalón e introdujo una y otra vez su miembro dentro de mí, sentía como sangraba por dentro, estaba llorando, aquellos gemidos del principio se habían convertido en gritos desesperados, el se excitaba aún más. 

¡Suéltame, me estás lastimado!- le decía.

Cuando por fin termino lo hizo dentro de mí, subió sus pantalones y fue directo a la mesa a seguir consumiendo  cocaína, ¿Era en serio?, ni siquiera se había preocupado por mí, simplemente terminó y no dedico un poco de su tiempo a quedarse a mi lado, le había entregado lo más valioso que tenía y a él no le importo.

Desgraciadamente era muy ingenua como para darme cuenta que no me quería y desde entonces comenzó mi verdadero tormento.