dancing

269 17 8
                                    



<<Mierda, la relación iba en serio. ¿Y si no les agrado? ¿y si la cago y empiezo a decir puras estupideces?

Miguel jamás me critica cuando lo hago, pero es por que me quiere... ¿¡Y si con esto ya no me quiere?!>>

Los pensamientos en la cabeza de Hiro eran más locos que de lo común, en serio estaba totalmente nervioso. Un nudo enorme habitaba en su garganta, e intentaba pensar positivo.

Pero era comprensible. Jamás había tenido una relación tan seria como la de estos momentos. Ni siquiera la que formó algún día con su mejor amigo Jos la superaba. Dicho chico, solo se burlaba de él desde alguna parte de la habitación.

-¿En serio crees que la vas a cagar?.- Preguntó con una ceja alzada y mirada divertida, a lo que Hamada, ignorando el hecho de que no supo cómo entró, asintió, con un toque de esperanza a ser animado.- Pues estás en lo correcto.- Carcajeó fuertemente y el pelinegro soltó un bufido cansado. Tomó asiento en la gran cama y su cubrió el rostro.

-¿Y tú cómo entraste?

-Miguel me dejó entrar.- Contestó simple, encogiéndose de hombros. Hamada soltó un grito que hizo al otro caer de la cama, y a Rivera entrar a la habitación.

-Dios, ¿por qué los gritos?.- Murmuró el moreno, riendo con delicadeza.

-¿¡Por qué no me dijiste que estabas aquí!?

-Otaku, te lo dije.

-No me digas Otaku, frijolito.- Formó un puchero y se levantó para darle un lento abrazo.

-Lo siento, amor. Pero, en fin, yo te lo dije. Solo que estabas muy ocupado eligiendo tu ropa para la cena de ahora con mis papás.

-Es que...-Soltó un suspiro ahogado y se dejó caer en la cama.- Estoy extremadamente mal.

-Tranquilo, tú solo enfocate en los pasos de baile que te dije que aprendieras y, todo estará bien.- Dejó de hablar al ver a Hamada tirado en el suelo, tratando de recuperar el aliento.- Dios, no no no, ¿¡Lo olvidaste!?.- Chilló con enojo, hincándose para tomar las mejillas de su novio. Este solo soltó un fingido sollozo.

-Rivera, enséñale a bailar a este intento de anime, no debe ser tan difícil... Mentira, sí lo es. Pero intentalo. Yo me voy, tengo una cita-. Anunció con una risa divertida, brincando la cabeza de Hiro y marchándose.

-Dios, Hiro... levántate, debo mostrarte algunos pasos básicos, prometo que una vez aprendido eso, puedo enseñarte a bailar bien una vez en la pista.

-¿Y es importante que baile?.- Susurró con un quejido.

-Demasiado. Ese es el chiste.

-Mierda, entonces ya.- Masculló, levantándose y limpiándose el traje, dejándolo impecable.

-¿Podemos usar el patio trasero para hacerlo?

-¿No se te hace incómodo?.- Lo miró con una ceja alzada, a lo que Miguel le dio un leve golpecito.

-Para enseñarte a bailar idiota.

-Oh, entonces sí, es perfecto para eso.

Luego de algunos minutos, ambos ya se encontraban en aquél lugar. Miguel intentaba encontrar alguna canción decente entre la Otaku reproducción de su novio, pero jamás encontró una.

-Bien, así, sin música. Ven aquí.- Le dijo negando. Tomó su mano y sonrió con ternura, mirándolo a los ojos. Amaba esos grandes y negros ojos. Tan asustados, tan suplicantes por que todo saliera bien.

One Shots - Higuel. [Editando]Where stories live. Discover now