Puedes contar conmigo.

790 55 19
                                    

Cogí el teléfono algo dormida. Tenía la esperanza de que fuera ella y cuando vi el móvil me puse tan nerviosa que se me cayó de las manos dándome en la cara.

-¡Joder!- me incorporé frotándome la cara y buscando rápidamente el teléfono para poder contestar.

"No"

No podía dejar de leer la palabra, atónita. Desde luego Inés era diferente. ¿Cómo iba a imaginarme que me contestara eso? Me esperaba algo más como un "Bien ¿y tú?" pero ella había decidido decirme que no estaba bien y yo no sabía cómo contestar. Me senté al borde de la cama y sopesé varias opciones y finalmente le escribí.

"¿Quieres hablar conmigo?"

No pasó ni un minuto cuando su respuesta me llegó:

"¿Cuan desesperada y sola tendría que estar para que tú fueras la única persona con la que pudiera hablar? Además, no nos conocemos de nada y por si fueras poco eres podemita."

No pude evitar sonreír y sentirme algo molesta a la vez ante el comentario. Me sudaban las manos y no sabía cómo podía hacer que Inés confiara en mí. Quería que me contara que le pasaba.

"Si no hubieras querido hablar conmigo no me habrías contestado que no estás bien ¿no crees? Además soy psicóloga, ya lo sabes. Si no confías en mí como política hazlo como profesional al menos. Legalmente no puedo contar nada"

El mensaje tardó un poco más en llegar que los anteriores. Accedió a contármelo todo. Empezó a decirme que estaba muy estresada, que cada vez estaba menos convencida sobre si seguir en Ciudadanos o no, y que a la vez tenía más y más responsabilidades en el partido. Estaba cansada de Albert y de los discursos vacíos y sin sentido. Me contó que siempre le había gustado la política pero cada vez se sentía más alejada de su verdadero yo y no sentía que estuviera representando sus ideales. Me quedé algo desconcertada con lo que me estaba diciendo y apenas supe que contestar. Antes de poder decir nada más añadió un último mensaje.

"Y para aliñarlo bien, Xavi hace un par de semanas me pidió el divorcio. Se ve que está con otra desde hace un tiempo. Supongo que es un cumulo de cosas que he estado llevando yo sola porque no sentía que nadie a mi alrededor pudiera entenderme."

Tomé aire sintiendo mucha pena por lo que me estaba contando Inés. Me habría gustado poder estar a su lado para consolarla.

"Entiendo cómo te sientes, al menos la última parte. Cuando me divorcié de Pablo sentí que nadie me iba a apoyar en mi entorno. No es que me equivocara finalmente, porque no tuve mucha gente en la que poder apoyarme, pero lo pude superar al final. Yo fui la que eligió separarme y entiendo que para ti será diferente pero pasará. Eres una mujer fuerte, y aunque ahora no veas salida todo pasará. Puedes contar conmigo cuando quieras"

Inés me mando un icono sonriente seguido de un "gracias". Ninguna de las dos dijo nada más. Me metí de nuevo en la cama sin poder conciliar el sueño pensando en lo que acababa de pasar. Inés Arrimadas me había hecho su confidente.


_____________________________________________________________

Bueno he podido escribir un poco más escaqueandome del trabajo ya que os ha gustado la primera parte. 


Quiero dedicarle este capitulo a Alba, mi preciosa amiga que me metió en el Irenés. Te quiero <3



Nuestra historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora