Mami | Sans | {Choans}

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Al abrir los ojos, me encuentro con una azabache.

Acerqué la mano, tomé con mis dedos los mechones de su cabello y los aparté de su rostro.

Me sorprende el parecido que tienen.

Me levanto de la cama, me estiro y luego camino hacia el baño.

Para cuando me estaba lavando la cara escuché que me llamaban, me seque con una toalla y regrese a la habitación.

— ¿Si, cariño? —. Pregunto viéndola.

— ¿Qué hay de desayunar? —. Pregunta mientras se frota los ojos.

— Todavía no hago nada, anda, ve al baño mientras preparo algo —. Le pedí mientras vuelvo a salir.

No debo de quedarme para asegurarme de que entró al baño, ella siempre me obedece.

Al entrar a la cocina me pierdo en mis pensamientos por un momento.

¿Realmente todo esto es real?.

Negé con la cabeza y comencé a preparar el desayuno.

Faltaron pocos minutos cuando veo que una pequeña bolita negra se pone de puntitas a mi lado, tratando de ver lo que hago.

Sonreí.

— Estoy ocupado, linda —. Dije, acariciando su cabello con mi mano libre.

— Quiero ayudarte —. Reprochó ella.

— No, puedes quemarte —.

— ¡Pero quiero ayudar! —.

— Dije que no —.

— ¡Pero..! —.

Suspiré.

Maldita sea, ¿por qué tuvo que salir igual de necia?.

Me voltee y bajé la mirada, encontrándome con una pequeña niña quien seguia insistiendo.

Dejé lo que estaba haciendo y la cargué, mirándola fijamente a los ojos.

Ella sin motivo comenzó a reírse, luego me abrazó.

— Mira, estoy algo ocupado, ¿por qué no vas a terminar el regalo para mami?, recuerda que hoy iremos a verla —. Pregunté mirándola, ella pareció recordarlo.

— ¡Es cierto! —. Gritó feliz.

La baje y ella casi al instante se fue corriendo, reí ligeramente.

Mami ... Esa mujer no tiene remedio.

No vive con nosotros.

Pero la niña la quiere de todos modos, y eso es lo que importa.

• • • • • • • • •

La mujer miró sorprendida a quienes se encontraban frente a ella.

— ¡Mami! —. Gritó la pequeña para luego correr y abrazar sus piernas, todo lo que le permitía su estatura.

La mayor solamente la miró, luego subió la mirada y miró al hombre.

— Sans... —. Murmuró ella.

— Pandora —. Dijo él aburrido.

— ¿Qué hacen aquí? —. Preguntó, ignorando a la pequeña quien seguia abrazando sus piernas.

— Nuestra hija quería verte —. Contestó él, haciendo énfasis en Nuestra.

Bajó la mirada, solamente le acarició el cabello, haciendo que ella la soltara y la mirara.

Underfail One Shot's (Escritos Cortos) | [En Edición]Where stories live. Discover now