Capitulo 11.

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La situación con Cameron no mejoro, se puso peor.

Me termino por mensaje de texto, POR UN PUTO MENSAJE. ¿Que costaba venir a mi cara y decírmelo en la cara? Pues él no fue lo suficientemente hombre y lo hizo por mensaje.

Aun recuerdo lo que decía, y eso que ya habían pasado dos meses desde que terminamos, solo me coloco:

"Lo siento Cass, no puedo seguir con esto. Terminamos".

Si, Cameron es peor de lo que pensé.

Hace un mes volví a la universidad, una semana antes de salir de vacaciones. Y cada vez que veia a Cameron lo evitaba, y él me evitaba a mi también. No me saludaba, no me miraba excepto que estuviera acompañada por algún hombre, del resto era invisible, y me sentía miserable por eso. Después de todo resulta que si me gustaba, de verdad.

Aunque pasar el rato con mi nuevo compañero de clases, Charles McGlae me ayudaba a no pensar tanto en Cameron, aunque por las noches eso era inevitable.

Hoy era el último día de clases y en la noche lo íbamos a celebrar en la casa de Lola, nada mejor que alcohol para olvidar las penas.

Lo mejor de todo es que la fiesta era con espuma y en la piscina, aunque claro igual íbamos a tener en el patio una pista de baile, nuestro bar y perros calientes y hamburguesas, la noche prometía.

Decidí que iba a ponerme un traje de año amarillo con el borde negro, era simplemente hermoso pero para cubrirlo mientras llegaba me puse un vestido de verano blanco por encima de las rodillas y unas sandalias amarillas, el cabello suelto y sin maquillaje, es decir iba a la piscina no creo necesitarlo.

Me paso buscando Charles, él era bonito, de baja estatura solo que dos pies mas alto que yo, cabello rubio, pecas en la nariz, ojos verdes y usaba unos lentes de pasta, era catalogado como el "chico bueno" él era simplemente bonito, lástima que fuera gay.

Llegamos a la casa y costo estacionarnos, el lugar estaba lleno, cuando estábamos entrando al patio me di cuenta que lo arreglaron muy bien, luces de neo, de todo.

Otra cosa que me di cuenta al llegar es que ya habían muchos borrachos vomitando entre los arbustos, chicos drogándose en el borde de la piscina, y las típicas zorras cerca de Cameron, Jake y Robert, a la que no veía por ningún lado era a Lola.

Decidimos ir por unas bebidas, nos las tomamos tranquilamente charlando fuera de la piscina, después de las bebidas nos metimos a la piscina, deje mi vestido perfectamente doblado, junto a mis sandalias y la camisa de Charles.

Nos metimos y empezamos a hablar, al rato se acerco Shio, era otra compañera de clases de nosotros, sus padres eran coreanos, empezamos a reír, y a divertirnos.

Nos salpicamos agua, comimos perros calientes y bailamos. Estaba agotada por lo que los deje bailando y decidí sentarme en las sillas plegables y mirar las estrellas.

- Hay pocas estrellas hoy.- Me dijo una voz tan conocida para mí.

Cerré los ojos y lo ignore, él no existía para mí o eso me hacía creerme.

- Siento mucho haberte terminado por mensaje Cass, pero es que no tuve el valor para hacerlo en persona. - Escuche remordimiento en su voz, o tal vez solo fingía.

- No pasa nada, igual lo nuestro no iba a funcionar.-Le dije dándole un sonrisa fingida y parándome.

Me agarro la mano y me miro, vi tristeza en su mirada, supongo que la mía reflejaba lo mismo.

-¿Cómo que no iba a funcionar?-Me dijo con voz entrecortada.

- Así es, no iba a funcionar. Tú eres Cameron Bass el playboy, y yo soy Cassie Meester la virgen pervertida, que le gusta leer, como ir de fiestas y estudiar. Tu en algún momento ibas a cansarte de la abstinencia y de mi, y sabes fue lo mejor terminar. Te debo un gran favor por hacerlo por mí.

Dicho esto me suelta y me da una última mirada antes de ir con Cloe y besarla, se que con eso quiere provocarme, pero, eso no va a funcionar. No caeré en un triste juego de chico dolido, oh no.

Volví junto con Charles y Shio, esta noche superaría a las demás, iba a ser la mejor noche de mi vida.

Tome tequila con Shio, mucho tequila. Me encontraba bailando con un lindo chico, no recordaba su nombre y tampoco quería saberlo, no dejaba sus jodidas manos fuera de mi cuerpo y me estaba cansando.

Suspire. - Me canse de bailar.

Me fui a tomar otro tequila, y otro más hasta que estuve vomitando tras los arbustos cuando siento que alguien me sostiene el cabello y me masajes en la espalda.

-Aun no entiendes que el tequila no es para ti.

Después de todo lo que le dije pensé que me iba a dejar de hablar, pero estaba equivocada, sí que lo estaba. . .

-En estos momentos no estoy para sermones, no sé si te diste cuenta.-Gruño.

-Como sea, vine para decirte que no tomare tus palabras en serio, se que la que hablaba eras tú dolida, aunque eso de virgen pervertida sí que fue gracioso.- Ríe entre dientes, y se me dibuja una sonrisa aunque él no la puede ver ya que sigo agachada.

Me levanto y me pongo cara a cara con él.

-No fui yo dolida, era la verdad. Espero que lo entiendas y podamos ser amigos, porque no voy a volver contigo.

-¿Quién hablo de volver? -Me dice y sonríe de lado.

Gruño y me alejo, no sin antes chocar mi hombro con él de él, si, una actitud madura.

Mientras me alejo lo escucho decirme y gritar ¡Esa actitud tan madura tuya me vuelve loco!

Niego con la cabeza y busco a Charles, aunque no lo encuentro por ningún lado.

-Hey tú, mosquita muerta.- Me habla una voz chillona que no veo ni reconozco, por lo que volteo a los lados.-

Antes de darme cuenta esta una morena, alta, pechos operados frente a mí con sus manos en su cintura.

-Aléjate de mi Cameron, o sino.

-¿O sino qué? Que sepas que yo era su antigua novia. -Le sonrió burlona.

-Sino lo lamentaras, y recuerda eras la ex.- Resalta esto último con su voz chillona y me empuja.

Me rio por lo bajo que pueden caer algunas personas.

Hasta que por fin encuentro a Charles, besándose con Robert. Situación incómoda, pienso.

Ya no quedaba mucha gente en la fiesta, los que quedaban era besándose y metiéndose mano.

Me siento a esperar que los tortolitos terminen su besuqueo.

Noto a lo lejos la morena tocando a Cameron por todas partes, indignada volteo la mirada, aunque para volver a mirar a los segundos y ver como Cameron la besa y le toca los pechos, se me llenan los ojos de lagrimas justo cuando Cameron deja de besarla, me ve y se aleja de ella prácticamente corriendo y escucho a la morena gritarle que a donde va.

Veo que ella voltea y al mirarme y ver que los vi sonríe, zorra.

Sí que me quería, estúpido, imbécil, troglodita, pervertido.

Llorando voy a tocarle el hombro a Charles, cuando me ve se asusta.

Lloro más fuerte.

-¿Qué paso mi reina?-Me dice con su voz gay.

-Cameron fue lo que paso. -Responde Robert por mí, lo veo y lo abrazo. Lloro hasta calmarme un poco.

-¿Me puedes llevar a casa? Por favor.- Pido entre hipidos.

Asiente y se da un piquito con Robert para ir a buscar nuestras cosas y conducirme al coche.

Maneja hasta mi casa mientras yo voy sollozando en silencio.

Cuando en mi casa me atrae en un abrazo y sollozo más fuerte.

-Shh, todo estará bien Cass-Dice mientras me hace masajes en la espalda, y me acaricia el cabello.

Asiento, le doy las gracias y entro derrotada a mi casa.

Ya acostada en mi cama, me duermo entre lágrimas.

I can't forget. (En edición y actualización lenta)Where stories live. Discover now