Ni madre ni padre, pero si la valentía de buscar a Kim Taehyung, mi hermano mayor. Tantos rriesgos que había tomado. Por un momento llegué a pensar que estaría muerto y que debía darme por vencida, pero todo mi equipo fueron el apoyo más grande. Ade...
Despedímos a los chicos... nunca fue tan difícil dejar ir, estaba deseando que volviesen sin apenas haberse ido. Han pasado 5 meses desde su partida... la casa se siente completamente distinta.
¿Qué ha pasado con Seúl? Todo está más que tranquilo por aquí. ¿Como va la relación con tu hermano? Cada día amándonos más... ¿Qué ha pasado con Jungkook? Nada, no hemos hablado tanto. Suelo buscar conversación cuando estoy junto a él, pero es muy cortante.
-Bomboncito de menta... ¿Vienes a desayunar?
-Aw, papá hace mucho no me llamabas así... estás más contento de lo usual... ¿todo bien?
-De maravilla querida, tengo a Jimin, a mi esposa, un techo y te tengo a tí contando a los demás... - sonrió. - Ven a comer. - salió y reí.
Ese hombre. Se la pasa diciéndo que tiene más de 16 hijos, todos lo amamos demasiado. Bajé y como de costumbre la mesa estaba casi llena.... casi.
-Al fin bajas. - dijo mamá.
-Hoy no me levanté tan temprano. - reímos.
Me senté y miré a Jungkook para sonreírle y raramente recibir una hermosa sonrisa de vuelta.
اوووه! هذه الصورة لا تتبع إرشادات المحتوى الخاصة بنا. لمتابعة النشر، يرجى إزالتها أو تحميل صورة أخرى.
Pasó un rato y ya habíamos terminado de comer. Reíamos y recordábamos las locuras de Namjoon.
-No mamá. - me paré. - Yo lo haré.
Comenzé a recoger los platos y todos los demás se iban para empezar su día de diferentes maneras. Mamá y papá planean un hermoso viaje de aniversario así que yo hago todo por ellos en estos momentos.
-Jimin... ¿Que haces? - pregunté al ver que era el único aún en la mesa.
-No sé que regalarle a mamá, o a papá. ¿Que se supone que les daré mañana?
- reí. - No lo sé.
-Puedo darle a mamá una pistola... color púrpura ¿Le gusta ese color no?
-Jimin, color púrpura, si... Un arma... no exáctamente, de hecho las odia.
-¿Tú que les darás? - bajó la voz.
-Compré rosas... púrpura como le gustan. Y a papá le compré Fortnite.
-¿Fortnite? - achinó los ojos.
-Es lo malo de dejar que tus amigos de 21 años se junten con tu padre de 40. - reímos. - Estan obsesionados con ese juego.
-Vale, le compraré otro control.
-Bien pensado chico.
-Y a mamá, una postal grande... y la llevo a cenar.
-Ya lo tienes.
Jimin
-¡Gracias! - la abrazé y tomé mis llaves. - Te debo una. - reímos y abrí la puerta para salir.