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2 semanas después

Los golpes azotaron con furia el saco de boxeo hasta que la gruesa cadena que lo sostenía se rompió dejando que este se estrellara con el suelo provocando un estruendo. La rusa soltó un largo suspiro para después dirigirse a la banquilla donde cogió su bote de agua dejándolo vacío al instante para dejarse caer en la misma banca.

Esta frustrada pues la boda de Steve y Sharon sería este fin de semana después de la discusión que habían tenido mantenerse al margen lo había llevado bien pues no había tenido conversación con el incluso había cortado todo lo relacionado con una misiones con respecto a Steve. Después de todo Steve estaba muy ocupado planeando su boda que estaba a nada se pasar.

Natasha colgó otro saco para golpear con más fuerza que la primera vez. Esta vez el saco se rompió más aprisa.

—¿Cuánto más debes golpear ese saco?

Natasha miró a Hill, detenido los goles. —Ah Sharon no puedo golpearla.

María río. —Ay Natasha sin duda tienes mucha rabia oculta, no debiste pasar a última base con Steve.

—Me importa una mierda Steve por mí puede hacer su vida con quién quiera. 

—Las dos sabemos que eso no es cierto, te importa demasiado.

Seco su rostro mientras hacía de su cabello un elaborado moño. —Ire a la estúpida boda solo para demostrar que me importa muy poco lo que ellos hagan con su vida. Y ya basta de tus sermones.
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—Estoy tan nerviosa que es como si la boda fuera ahora mismo. — Sharon se miró en el espejo luciendo su vestido de bodas. 

—Te ves hermosa— Sally la incondicional amiga de Sharon le ayudaba a entrar en el vestido no es que se vaya a casar ya pero necesitaba una prueba mas.

—¡Estoy tan feliz! — Los ojos de Sharon se iluminaron —no puedo creer que vaya a casarme y con el hombre más increíble del universo.

—Lo se y estoy feliz por ti — ambas chicas se abrazaron. —Tu y Steve seran muy felices.

—Tia Peggy siempre dijo que él era un extraordinario ser humano y no se equivocó.

Natasha rodó los ojos pues estaba ahí escuchando todo y no podía evitar ponerse de un mar de emociones y odiaba todo aquello.

—Ojala pudiera quemarle su estudio vestido.— Hizo una pausa para mirar a Hill —no podría porque Steve me culparia de inmediato.

—¡Chicas hola!— Sharon sonrió emocionada.

—Hola, justo pasábamos por aquí María y yo porque dijimos: ¿Será que Sharon necesita ayuda con su prueba de vestido? Porque faltan unos días.

—Gracias, pero Sally me ha ayudado pero aún tengo mucho que hacer...Steve —sonrio al ver a su prometido y lo beso — me alegra ya estés aquí pensé que venías mañana.

—Adelante un par de cosas para estar a tiempo— le devolvió el beso a Sharon.

—Debes saber que todo está bajo control y las chicas han ofrecido ayudarme — le sonrió a Natasha. —Asi que chicas vamos— te veo después —dio un último beso a Steve antes de marcharse.

Y antes de que Romanoff pudiera seguirle el paso a las demás Steve la sujetó del brazo.

—No intentes arruinar esto para Sharon.

Ella torció el gesto en una mirada amenazante. —Por supuesto que no —intento zafarse pero no logro hacerlo. —¡Steve! — Advirtió.

—Te lo advierto. Mira Natasha no creas que no puedo jugar sucio como tú.

¿Solo amigos?🤔Where stories live. Discover now