One Shot PPGXRRB

Chef, usted es sexy💙❤️

Momoko se encontraba realizando su práctica en una pastelería, había finalizado su carrera y debía cumplir tres meses de práctica para poder recibir el título, en estos momentos se encontraba cortando frutillas para un pastel de frutos rojos.
Su chef, Boomer había llegado, la pelirroja lo saludo y continuo con su trabajo, está vez más nerviosa, aquel rubio tenía algo que la volvia loca, que hacía acelerar su corazón, era el Chef más joven de aquel local y el más sexy también.
El nombrado coloco su pechera y se acerco a la menor, Momoko tenía 18 años y el 22. Coloco su mano izquierda en la cintura de su menor y pregunto.

- ¿Para que estar cortando esto?
- Llegó un pedido, la señora María quiere dos pasteles, uno de chocolate y otro de frutos rojos para esta tarde.
- Bien, me encargaré de la torta de chocolate entonces, ¿Los arándanos, las frambuesas y las moras están listas?
- Si, están en un bowl, terminando las frutillas los echaré a coser, así ocupo el jugo para humedecer el bizcocho
- Bien pensado, me gusta. Comenzaré con la otra.

Comenzó a caminar hacia el otro mesón, dejando antes en la espalda de la chica ciertas caricias, lo que causaron cierto escalofrío en ella. Al terminar de cortar la fruta, la unió junto al resto para meterla en una pequeña olla y empezar a cocerla. Minutos después está soltó un jugo, lo saco del fuego y ocupo aquel liquido para humedecer cada parte del bizcocho, comenzó a rellenar este, coloco crema con colorante rojo encima y con la espátula comenzó a esparcirla por todo el pastel, decidió cortar nueces para agregar encima de los rocetones que había hecho con el resto del merengue y en medio frutos rojos. Dando por finalizado su obra.

- ¡Chef!
- ¿Si?
- Terminé el pastel
- Muy bien, te quedó hermosa
- G-Gracias, ¿Usted terminó la de chocolate?
- Si, ven dejemos los pasteles dentro del refrigerador, luego iremos a ordenar la bodega.
- Está bien.

Guardaron los pasteles y como dijeron antes irían a ordenar la habitación donde todo se guardaba, la menor se encontraba un poco nerviosa, estaría en un habitación a solas con el chef más sexy que había visto, se golpeó mentalmente, no podía pensar cochinadas con su chef, el nunca la tomaría en cuenta.
Entraron al cuarto y el rubio cerró la puerta.

- ¿Porque cerró, chef?
- Siento que será más cómodo, ¿Te molesta?, Si quieres la vuelvo a abrir.
- No tranquilo, está bien.

Comenzaron a ordenar los productos, a ver las fechas de vencimiento y botar lo que ya se encontraba vencido. Ambos se encontraban en silencio realizando su tarea, Momoko se encontraba algo incómoda, no le gustaba mucho el silencio, por suerte el chef hablo.

- ¿Y como te has sentido aquí?
- Genial, me siento muy cómoda, por suerte no he tenido ningún problema, aparte del chico de caja que me acosa un poco.
- ¿Dexter?
- Si, hace unos días me dijo que yo le gustaba, pero no, no es mi tipo.
- Entiendo, ¿Cuánto tiempo te queda de práctica?
- Solo un mes, ha pasado muy rápido el tiempo, extrañare esto y a usted también
- ¿Me vas a extrañar?

Esta se quedó en silencio, no debió decir eso. Ahora sus mejillas se encontraban rojas, volteo y trato de que su mayor no viera sus mejillas, trago saliva y contesto.

- Si, usted ha sido muy amable, me ha enseñado mucho también, aparte lo encuentro como un amigo
- ¿Amigo?
- Si, ¿Le molesta?
- No claro que no, ¿Por casualidad que chico es tu tipo?
- ¿Del trabajo? Mmmm, creo que Raze
- ¿El Garzón?
- Si, es muy tierno, es amable, tiene lindos ojos y—
- ¿Y yo no soy tu tipo?
- ¿Q-Qué?

Esta volteo y el rubio se encontraba frente a ella mirándola fijamente, las mejillas de la menor se habían vuelto rosadas, su mayor se encontraba demasiado cerca y eso la ponía nerviosa.

- Responde, ¿Yo soy de tu tipo?
- Usted es muy guapo, atento y tierno. Ha sido muy amable conmigo en estos meses, es una gran persona.
- ¿Es un si?

Se apego aún más al cuerpo de la pelirroja, su corazón latía a mil por hora, ¿Cómo podía estar tan tranquilo?, Coloco una mano en su cintura y la otra en la sonrojada mejilla, el chico sexy de ojos azules de a poco comenzó a disminuir la distancia de sus labios hasta terminar rozando los otros, finalmente la beso, como tanto había querido, como tantas veces lo había soñado, Boomer tuvo la valentía de besas aquella boca que tanto anhelaba, la mejor sin dudar correspondio el beso, era un sueño echo realidad, siempre creyó que el nunca la tomaría en cuenta, pero no. El tal vez sentía algo, tal vez el amor era mutuo, sin evitarlo sonrió en el beso, por falta de aire separaron sus labios.

- ¿Porque fue eso, Chef?
- ¿No es obvio?, Me gustas. Eres hermosa, graciosa, inteligente, eres perfecta.
- ¿Porque no me dijo?
- Porque no creí que fuera tu tipo, creí que te gustaban más atractivos como Rage.
- Chef usted es sexy

Dijo para ahora ella acortar la distancia, comenzó a besarlo agregando al beso una danza entre sus lenguas, coloco sus manos detrás de su cuello acariciando los rubios cabellos de aquel hombre que la volvia loca.
Por otro lado Boomer se encontraba feliz, aquella chica sentía algo por el, coloco sus manos en su cintura y por segunda vez apego su cuerpo al suyo, bajo sus manos hasta sus muslos y la tomo haciendo que rodeará su cintura con sus piernas, acción que no negó la menor, continuaron con besos y caricias.
Para Momoko su chef cada vez se le hacía más sexy.
Lo mejor de toda esta declaración, es que nadie sabría de aquella aventura que tuvieron en esa bodega.