La llamada

846 88 16
                                    

Mi celular vibra en en bolsillo de mi pantalón y no dudo en apagarlo y lanzarlo al asiento de atrás.

Sigo conduciendo mientras disfruto de todo lo que veo. Agradezco tanto estar a sólo una hora de la carretera, pues necesito tanto de esta. Sigo conduciendo hasta que llegó a la carretera. Bajo los vidrios del auto y dejo que el aire despeje mi cabello.
El viento frío causa escalofríos en mi piel y mi respiración se acelera al recordar esa jodidos vez que Alex me llevo en su moto,veo que sólo hay línea recta y aprovecho para cerrar mis ojos, aceleró y disfruto del iré golpeando mi rostro y despeinado aún más mi cabello.

-¿Por qué siempre vas tan tensa?.

-No lo sé.

-Relájate Bailey- grita- mira, estira tus brazos, preciona más tus piernas contra las mías y disfruta del viaje, no pasará nada, ni te caeras, confía en mí.

Sigo sus órdenes pero con temor.

-Tranquila Bailey, prometo que no te pasará nada. Cierra tus ojos, anda, ahora, suelta una mano.

-Pero Alex...

-Vamos Bailey, tienes que aprender a disfrutar- hago lo que pide.

-Bien, ahora suelta tú otra mano, confía en ti Bailey, ahora dejalo salir todo Bailey, grita si es necesario.

Grito llena de emoción.

-Eso bonita...

Su mirada viene a mi y esa ronca risa que soltó cusndo me vio disfrutar tanto de el momento. Es increíble como una persona puede hacerte experimentar tantas sensaciones con cosas tan simples como una risa que te eriza la piel, una sonrisa que laguea tus pupilas, una mirada que hace temblar tu ser y acelera tu corazón, esto y más me hacía sentir Alex, con cosas tan simples, como lo son el recuerdo.

Siento las lágrimas correr y es hora de entrar al auto nuevamente. Sigo conduciendo mientra suma presión en mi pecho me corta la respiración, las lágrimas no me dejan ver y aprovecho el primer espacio libre para detenerme. Me recargo en el asiento mientras lloro y jadeo, mientras intento sacarlo todo y tal vez sanar esto que siento, aún que cada día parece más inútil intentarlo, es obvio que Alex sigue aquí, en mi, aún que no quiera sentirlo ni aceptarlo, ahí esta, esa parte que de él se quedó conmigo, es misma que hoy en día causa mis lágrimas y noches en vela.

Alex

Observo una y otra vez el boleto de avión que está en mis manos y sigo sin tomar una clara decisión.

No puedo ver a Beily, y volver a ese hospital, no después de irme sin despedida alguna, pero se que no estoy bien, que esto cada vez empeora y que los medicamentos parecen tener menos impacto en mi con cada toma.

Mi manos tiemblan y se que se viene otro episodio, con sólo recordarla. Mi odio hacia Beily es indescriptible, y aterrador, pues hay noches en las que sueño con ella, pero no de la mejor manera, ni siquiera cerca, no para alguien a quien la muerte no le parece la mejor de las visualizaciones sobre una persona.

Me dejó llevar por mis impulsos y llamo al doctor sin rodeo alguno.

-¿Alo?.

-Doctor, soy Alex.- musito agitado.

-Alex, ¿qué sucede?, no me has escrito, no he sabido nada de ti por meses.

-Lo sé, me intentaba convencer a mi mismo de que todo estaba bien, pero no es así, todo está empeorando cada vez más, cada vez un poco más, y esto se vuelve- intento controlarme- más difícil, todo es más difícil cada vez.

-¿Y tus medicamentos?.

-Ya no hacen efecto, es como si en cada toma tuvieran menos impacto.

-Mierda, Alex, necesito verte.

-Yo voy.

- No Alex, no es bueno que viajes en ese estado, yo iré allá, llegó mañana.

-Necesito viajar allá.

-Alex acá no hay nada, y tu estado impide viajar, cualquier comportamiento extraño en ti y pueden meterte preso.

-Necesito verla- susurro mientras aprieto con fuerza el teléfono en mi mano.

-¿Ver a quién Alex?- aquellas imágenes aterradoras de Bailey viene a mi mente y nublan mi vista. Mis músculos se tensan y mi mandíbula se aprieta. Mis puños se cierran y una satisfacción inmensa me recorre cuando la respiración de Baikey cesa, ella es la culpable de todo esto, de que yo este así, y se que terminará cuando ella ya no esté.- Alex responde, ¿Alex sigues ahí?, Alex contesta.

-A Bailey, necesito ver a Bailey.

-Alex, Bailey de seguro en estos momentos no tiene tiempo para visitas, y eso no es lo que tu necesitas tu necesitas que vaya ahí y te cheque, te escucha muy mal Alex.

-Necesito ver a Bailey, de verdad lo necesito.

-Alex, comprende que no tienen tiempo, ni ella ni Jack, pero puedo hablar con ella luego de ir a verte.

-¿Por qué no tienen tiempo?.

-¿No te enteraste?.

- No he podido hablar con ella, siempre que marcó está ocupado o no responde- miento pues no tengo siquiera su número.

-Alex, Jack y ella se van a casar dentro de un par de semanas...

El suplicio de BaileyWhere stories live. Discover now