Ella es perfecta

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Miriam:

Llego al trabajo, con un pequeño pesar porque Mimi no me escribió desde ayer ... y eso que le puse hola para saludarla, pero ni me respondió, me imagino que tendría cosas que hacer.

Veo a los demás cuchicheando con caras de sorpresa, me ven y Claudia se pone de pie. Hace una mueca y se me acerca. Nos saludamos.

-¿Qué ocurre?- pregunto con un presentimiento malísimo.

-¿No te has enterado?

-eh ¿No?- ¿No le paso algo a Mimi, verdad?

-Es que Mimi- abro la boca pasmada- y Patricia... discutieron a gritos... según las señoras de la limpieza.

No digo nada de la sorpresa. Qué raro, esto no me gusta nada. ¡Pero si Mimi es tan pacífica!

-Y las pilló la jefa- termina. Trago saliva.

-Ojala no pase a mayores- digo haciéndome la calmada.

-Esperemos, la jefa es una mujer paciente... pero discutir gritando...- hacemos la misma mueca.

Me siento, apoyo ambos codos en la mesa y espero. No vale la pena fingir en el trabajo. Quiero saber que ocurrió.

Salen, lo primero que veo es a Mimi saliendo muy seria con Patricia, ésta última la mira y hace una mueca mientras le regalan una mirada llena de rabia. Mimi ni nos mira, coge sus cosas y se dirige a la salida enfurecida.

Quizá no sea el mejor momento para hablar con ella.

-¡pssst! Patricia ¿Qué les dijo?- dice Saydi bajito.

-Suspensión por un día- dice desganada- y una buena advertencia- ¡adiós chicas!

-Adiós- se despiden.

Suelto un suspiro en mi asiento, es nuestro primer día después de las breves vacaciones y ya no quiero hacer nada. Me quedo en el ordenador eficientemente trabajando hasta la hora del comer.

Pero mi estado de ánimo cambió.

¿Cómo se atreve a ni mirarme? ¿Qué culpa tengo yo? Cuando salga de este maldito lugar, ya verás Mimi.

-Ya verás- murmuro enfadada.

-¡Wow! Que miedo, es raro verte así- pongo los ojos en blanco mirando a Efren sentarse al lado, en el escritorio de Mónica. Ni cuando le arranque una hoja si querer a un libro tuyo apretaste tanto los dientes- recuerda- Aún me duele el golpe. ¿Cuándo nos castigaron por el escándalo?

-Dos semanas. Nunca me arrepentiré- lo miro asesina- ¿Qué haces aquí?

-No fuiste a comer, creí que estabas en el baño reproduciéndote; pero al parecer es en lo último que estás pensando. ¿Qué paso?

Me mira... bueno es mi hermano y mi mejor amigo.

-Mimi tuvo una discusión con Patricia, las suspendieron este día y no sé nada de ella.

-¡Joder!- se sorprende- ¿y por qué?

-Eso me gustaría saber- mascullo golpeando el teclado.

-¿Crees que paso algo entre ellas?- pregunta sin anestesia.

-No sé. Más le vale que no. Trago saliva con dificultad. Efren solo me observa.

-Pero viven cerca... ¿por qué no vas luego y se lo preguntas?

-Eso pensé... pero no somos nada.- Digo triste, me hace sentir como "tonta" ir a pedirle explicaciones.

-Vosotras hace mucho que dejaron de ser "nada"- rodea los ojos- ¿Crees que Mimi no te quiere? ¡Por favor! ¡Vosotras ya no estáis fingiendo lo de ser novias!