Capítulo 44

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- Que le has hecho?

- Nada, simplemente le hice unos pequeños arreglitos

- Tienes que detener esto YA! quién carajos te crees para decidir quién vive y quien muere?

- Ellos han estado condenados desde el inicio de su creación, solo míralos, viven como si nada les importará, tratando de retrasar lo inevitable, creyendo que viven para un propósito, no Gamora, yo simplemente cambiaré su destino, y los que logren sobrevivir vivirán en prosperidad

- Tú si que eres un lunático...

- Puede que si, pero nada de igual forma va a suceder... Así que porque apresuramos las cosas y me dices dónde está... La gema del alma

- Y que te hace pensar que se dónde está?

- Oh, mi niña, te encomendé esa misión hace mucho tiempo, se que sabes donde está, su ubicación exacta - se mostró un holograma

- De verdad, piensas que podremos hacerlo?

- Claro que si sólo es cuestión de tiempo

- Sabes que él está buscándolas

- Lo se, pero no podrá obtenerlas... Le faltara una, y jamás sabrá donde está...

- Lograste...

- si... Pero jamás lo sabrá

- el holograma termino...

- Pues que pena que creas eso porque no tengo ni la menor idea de dónde se encuentra

- Crei que eras más inteligente

- De pronto unos rayos comenzaron a atacar el cuerpo de Nebula - Basta!

- Dime dónde se encuentra o me encargaré de hacerla chatarra inservible

- No lo se!

- Bien... - los rayos volvieron otra vez...
Haciéndola gritar aún más

- Basta! Basta!... Esta bien... - se acercó a acariciar a su pequeña hermana... Qué dios la perdonará... - la gema... Esta en Vormir

Con el portal llegaron inmediatamente, siendo recibidos por ese espectro

- Asi que... Vienen por ella?

- Si ya lo sabes, solo entregala

- Es una pena... Yo no puedo hacerlo, solo será el guía que los lleve a ella, ese es mi castigo... Un tesoro que jamás podré obtener...

- Muy bien - siguieron el camino hasta que por fin estaba en la cima de un enorme acantilado - y ahora qué?

- Para obtener la gema del alma, se tiene que pagar un precio... Es decir... Un alma, por un alma... De lo que más amas en este mundo...

- Gamora se soltó a reír - Es una pena! Qué no podrás obtenerla! Porque tú! No amas nada ni a nadie!

Pero el titán no dijo nada, tan solo comenzaron a rodar lágrimas por sus mejillas

- Ja! De verdad? Lágrimas...

- No son por el...

- la chica se puso tensa de inmediato

- Perdoname...

La chica cayó al vacío del acantilado, el trato estaba hecho, y enseguida obtuvo lo que tanto quería

- Lo lograste?...

- Si...

- A que costó...

La Fuerza Del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora