La mentira

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Hola, me alegra mucho ver que han llegado hasta aqui, a pesar de las faltas que tiene este documento, algunas personas me lo han hecho saber y de verdad les expreso mis disculpas, yo se que es una falta de respeto al lector y les pido me comentan, si desean que retira las historias o si me daran el tiempo para poderlas editar desde un computador, ya que yo escribo desde un celular y por ello es que se me suelen pasar las palabras.

Les agradesco.

Luz de Luna.


Ewan

Corro inmediatamente hacia la habitación de Charlotte, y entro muy enojado, ella lo persive y no me responde de beso como siempre lo hacia.

— Quiero que me expliques ¿como es que tu prima aparecio al sur de las tierras y no al norte como deberia haber hido?—

— ¿Que, donde aparecio Kara?—

Su rostro mostraba preocupación

— No me mientas Char, tu debiste saberlo, ¿ ella te pidio que mintieras?—

De inmedito, sus ojos se llenan de lagrimas y se cubre su rostro.

— Tenia miedo de decirtelo— dice entre sollosos.

— Oh! Char, pero sabes que yo te protejo, tu prima tiene muy mal caracter pero no te lastimaria—

— Tenia miedo de que pudieras hacer tu—

— Y porque, jamas te he lastimado a ti—

— Pero podrias irte detras de ella, al sentir celos de que ella se fuera con su antiguo amante—

¿Que?, un amante... ¿Por eso era tan fria conmigo?.

— ¿ Que sabes de Kara?—

— Se rumoraba en el clan que la señora tenia un amor con el que se encontraba en sus escapadas, cuando me dijo que iba a estar en un lugar mejor,  relacione una cosa con otra—

— Perdoname Ewan, te menti, tenia miedo que me dejaras.... yo te amo—

Charlotte me ama, si... Y yo a ella. El sentimiento es tan bonito, pero a la vez me molesta que haya mentido, tenia planeado proponerle a Kara una salida a todo este montaje, sin embargo ella decidio irse, irse con su amor.

A la vez me pregunto si no es exactamente lo mismo que he hecho yo, pero no, yo no menti, siempre fui honesto.

— Yo tambien te amo— digo abrazandola— pero no me gusta que me mientas Char, no lo hagas, porque sino, este amor, se ira destruyendo.

— No lo volvere hacer, lo prometo— ahora si se me acerca y me besa.

Nuestro romance lo hemos mantenido en secreto, nadie lo sabe aun, seria una falta de respeto ante Kara, pero ella no fue discreta, lo que me indica que la carta es una mentira y que ese tal Gavin, tal vez es el amante de Kara y que este al enterarse que estaba casada la rechazo.

En el fondo me alegra de que este pasando por esto, por mentirosa, ire por ella y tendra que verselas conmigo, el esposo complaciente ha dejado su puesto.

Kara

Iona y su hija sr han portado de maravilla, me han cuidado y ayudado en mi recuperación, hoy el Laird ha pedido que me reuna con él, me llenaron los nervios pero Iona me calmo hablandome de como gobernada él, asi que creo no es un hombre cruel.

Naira me acompañara, al parecer Iona tiene un poco de dolor de cabeza y no puede aconpañarme, pero en realidad su dolor es sospechoso.

Nos dirigimos al castillo en la humilde carreta de Iona, al llegar los guerreros nos escoltan hasta una bonita sala al interior del castillo, llevo puesto un bonito aunque sensillo vestido que Iona me ha regalado, es una mujer muy bondosa.

Me siento un poco cohibida, mi cara ya esta desinflamada aunque aun tiene rastro de los morados y raspones y mis costillas todavia estan resentidas.

— Hola, soy el Laird Gavin MacTravish, ¿como se encuentra ?— el hombre habla detras de nosotros asi que me guiro con sorpresa.

— Hola señor, es un placer, Soy Kara MacKenna— Es un hombre muy guapo, me presento con mi nombre de soltera, al fin y al caso el matrimonio con Ewan se acabo— me he recuperado muy bien, debo agradecertelo.

— La curandera ha hecho un gran trabajo, pero, ¿ MacKenna? vistes los colores MacKinton—

— Es una larga historia mi señor, pero le aseguro que soy MacKenna—

— Entonces he cometido un error, les he informado al Laird de su estancia aqui—

— No se preocupe usted, ellos me pueden ayudar a volver— aunque ruego a Dios de que no venga Ewan

— No es tan sencillo Lady Kara— dice centandose en su silla.

— Los MacKinton tenian un tratado con nuestro clan para mantener la paz, ni nuestro pueblo  cruzaba el suyo, ni él el de nosotros, creo que sabe a que me refiero—

— Si, lo comprendo, pero pido su disculpas, mi llegada aqui fue un accidente, fui secuestrada del castillo y un hombre me traia cegada, al lograr escapar corri sin rumbo fijo, cai por el precipicio, y por eso estoy aqui—

— Debiste sentir mucho miedo— dice acercandose a mi.

— En el momento si, ahora ya no— le digo sosteniendole la mirada.

— Dime Lady Kara, ¿ Por que estaba usted en el castillo?—

— Naira, podrias esperarme fuera de la sala— le digo de forma gentil a la niña

Ella dice con su cabeza y se dispone  a salir.

— ¿Tan complicado es?— me pregunta.

— Seras la primera persona a quien se lo cuento, y debo pedirle mi señor que por favor me comprenda y si desea que me marche asi lo hare—

— Adelante, hablara— me toma de la mano y me acerca a una silla junto a él—

Le cuento sobre nuestro compromiso, la trampa de nuestro matrimonio, el porque sigo siendo una MacKenna al ser la unica heredera de mi clan, el matrimonio con Ewan, su romance con Chalotte y la perdida de mi hijo, al final, una sola lagrima sale por mis ojos.

— ¿Le querias?— me pregunta mirandome fijamente.

— Cualquier sentimiento que hubiese tenido por él,  ha muerto con la perdida de mi hijo— le contesto— no quiero que nadie lo sepa, te lo pido por favor, si se llega a saber, Charlotte pasara a heredar, un Clan que es mio por derecho.

— Entonces que piensas hacer—

— Buscare la forma de aunlar este matrimonio, y luego sere la señora de mi pueblo—

— Kara, tienes todo mi apoyo, puedes confiar en mi, te aprotejere ayudare, te doy mi palabra— me dice mirando a los ojos, sin una pisca de duda y mentira, Dios porque me enviaste con el hombre equivocado.


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