Entre la indecisión y el miedo

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Comenten la historia, me duele no tener comentarios :'^

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Al día siguiente, Todoroki fue a clases acompañado por Tetsu, pero el platinado pudo fijarse en que el chico bicolor no parecía estar muy atento a lo que le contaba. Supuso que era por lo que había pasado la tarde anterior, así que decidió no decirle nada.

Llegaron a U.A. y cada uno fue hacia su clase. Durante toda la mañana Todoroki no prestó mucha atención a las clases, lo que preocupó a sus compañeros. Pero cuando le preguntaron dijo que no pasaba nada y que sólo estaba cansado.

Llegó la hora del ensayo de Romeo y Julieta. Ese día ensayarían dos escenas: una pelea y un monólogo de Julieta.

-Bien, comenzaremos con la escena de la pelea entre Romeo y Paris.-

Tetsu, Shoto y Midoriya subieron al escenario. Todoroki se tumbó sobre el suelo mientras que Midoriya tomaba un ramo de flores de atrezzo y se colocaba a un lado. Tetsu se puso a un lado del escenario, listo para entrar y un poco molesto de la cercanía del peliverde con su Shoto.

-Bien, comenzad.-

Midoriya inspiró hondo y comenzó a decir sus frases.

-Vengo a cubrir de flores el lecho de la criatura más hermosa que ha creado Dios. Amado Julian, recibe mis humildes ofrendas que traigo para adornar tu triste tumba.-

Mientras Midoriya terminaba de pronunciar sus frases, Tetsu se acercó para dar comienzo a su diálogo. Midoriya, fingiendo sorpresa, le miró acusatoriamente. Casi se podría decir que el sentimiento era más genuino que actuado.

-Tú, el asesino de Teobaldo, el primo de mi amado, cómo te atreves a siquiera pisar este lugar. Pon fin a esto, de ser necesario yo mismo acabaré con tu vida.-

Tetsu se acercó a donde estaban Midoriya y Todoroki, y tomó la mano de su novio, que se encontraba echado en el suelo con los ojos cerrados, bajo la atenta mirada del otro chico. Los celos eran tan palpables, que todos, incluido el maestro, pensaron que Midoriya se metía muy bien en su papel.

-No has de hacerlo tu, a morir vengo. Pero no tientes a mi paciencia, pues ahora mismo lo único que deseo es estar junto a mi amor hasta mi último aliento.-

Izuku se levantó de su lugar y blandió una espada que le habían dado para representar la pelea con Romeo.

-Vil bellaco, aléjate de él.-

Tetsu se levantó enfadado y sacó también una espada.

-No, si así lo deseas, pelearemos por estar a su lado.-

Los dos se pusieron en guardia y comenzó la lucha. En un momento dado, Tetsu le dio en la muñeca a Midoriya, que soltó la espada. Tetsu le apuntó al cuello y fingió que le hacía una herida mortal. El peliverde cayó y Tetsu lo apartó para quedar solo con Shoto. Por un momento la idea de matar en verdad a ese arbusto le pareció tentadora.

-¡Magnífico!- Interrumpió Yata.- Sin embargo tendremos que profundizar esa pelea entre Paris y Romeo. Practicad con la espada y seguro que os saldrá perfecto. Ahora haremos la escena en la que Julieta se queda sola en su habitación y se toma el brebaje para fingir su muerte.

Permanece junto a miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora