I can't let go » kth + ksj

Quince

Advertencia: contenido sexual, no es explícito.

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❝ Así, pues, pensemos asiduamente tanto en nuestra mortalidad como en la de todos a los que amamos ❞

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—Aquí están las fotos que me pediste que revelara, hyung.

—Déjalas a lado de mi termo —pidió Taehyung al menor desde su escritorio mientras leía algunas anotaciones que le había dejado su jefe sobre algunas fotos que tendría que tomar después.

El menor lo obedeció, dejando la pila de fotos en el lugar que le había indicado. Taehyung le agradeció, esperando a que el chico saliera de su oficina, cosa que no sucedió.

—¿Necesitas algo más, Jungkook? —preguntó, tratando de no sonar grosero, no le molestaba la compañía del menor, simplemente quería continuar trabajando sin que lo interrumpieran.

—Hyung, ¿puedo preguntarte algo?

Taehyung levantó una ceja, confundido por la actitud de Jungkook. Normalmente el menor no solía compartir muchas palabras con él, viendo que él era un fotógrafo y Jungkook era en realidad un becario en la revista que estaba en sus últimos semestres de periodismo, por lo que realmente su campo de trabajo no era realmente de su interés, aunque eso no cambiaba el hecho de que siempre lo había ayudado con lo que necesitaba.

Aunque no estaba muy seguro de que su disposición se debiera realmente por amabilidad...

—Está bien —dijo, levantando su mirada finalmente hacia el chico, quería continuar con su trabajo, pero la curiosidad por saber qué le preguntaría le había ganado.

—¿Te sucedió algo? —preguntó viéndolo a los ojos.

Taehyung no comprendía a qué venía su pregunta, ni tampoco sabía exactamente a qué se refería.

—Jungkook, temo decirte que no sé de qué estás hablando.

—Tus fotos, hyung —trató de explicar el menor, tomando la pila de fotografías que había dejado momentos antes, extendiendo algunas de ellas sobre su escritorio—. Tu estilo cambió.

Taehyung observó las fotos, y se dio cuenta de lo que el menor estaba tratando de decirle. Era la primera vez que veía esas fotos desde que las había tomado. Había sido una o dos semanas antes de la muerte de Namjoon, y sabía perfectamente qué había estado pensando cuando las había tomado. Podía ver el enojo, la frustración y la irremediable tristeza que había logrado salir de él hasta llegar a tocar sus fotografías después de lo que había sucedido aquel día.

—Por eso quería saber si algo te había sucedido —continuó diciendo el menor, sin percatarse de que Taehyung se había perdido de nuevo en esos pensamientos de los que tanto tenía miedo últimamente—. Sé que después de esta sesión fue cuando te tomaste un descanso, entonces yo...

—No fue por lo mismo —aclaró rápidamente, aunque dentro de él sabía que ambos sucesos estaban relacionados de una manera—. El día que tomé esas fotos tenía muchas cosas en mi cabeza, eso es todo. En cambio, el descanso que tomé fue porque mi mejor amigo falleció.