Epílogo

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Yo...Yo aún lo conservo.

Soy un estúpido, lo sé y me regaño cada vez que pienso en lo que hice. En lo que te hice

Mi jefe me regañaba como de costumbre, mi paciencia se estaba agotando con este hombre y mis ganas de gritarle con fuerza para que se callara de una vez por todas eran muchas, pero no debía o me echarían de la empresa.

Odiaba que los jefes se aprovecharan de esto, aunque no podía hacer nada para evitarlo.

Salí de allí con la furia brotando por los poros, mis compañeras me trataban de animar y mi mal genio no se arreglaba

Cansado de estar en ese entorno laboral decidí salir para tomar un respiro, estábamos en otoño si mal no recuerdo y las hojas del lugar caían libres, con lentitud, con tanta hermosura que deslumbraba. Esta era una de las mejores épocas en Canadá, amaba tanto el país por ello.

Camine sin rumbo alguno, esperaba que todo el martirio en mi cabeza desapareciera, que por un instante olvidara al presidente Seo y pudiera ser feliz.

Llegue hasta los rieles del tren y vi a un lindo chico con cabellos azabaches quien miraba con ímpetu su reloj. Me sorprendí mucho al ver que eras tú, iba hacia ti, pero el tren paso con rapidez.

No, susurre triste.

--¡Jimin!-- grite con esperanzas-- ¡Yo lo conservo! ¡Conservo aquel peluche!

Cuando el tren paso por completo ya no estabas, me quede paralizado.

Al llegar a casa llore como idiota abrasado a aquel corazón con carita que te había robado la primera vez que nos conocimos, la vida era tan difícil, yo sólo quería hablarte y disculparme por ser tan cruel en mi adolescencia, pero no pude y quien sabe cuando logre hacerlo.

Yo... Yo aún lo conservo, Jimin.

Lo conservo por ti.

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R

esubir esta historia me trajo muchos recuerdos de cuando la escribí, espero les guste tanto como a mí traerla
Mag 2021

-Magel

Para mi mejor amigo [MinV/ Vmin] --Terminada--Donde viven las historias. Descúbrelo ahora