Engaños -G!P- (Adaptación Camren)

Capítulo 08

Pasamos una tarde agradable, vimos películas de terror y comimos palomitas de maíz y caramelos, Camila me llevo hasta una habitación junto a la suya donde tenía guardado su piano de cola y toco para mí infinidades de canciones, al anochecer fue su turno de pedirme que no me marchara y sin dudarlo había aceptado pasar la noche en su compañía.   

Era un poco más de media noche y de nuevo Camila y yo estábamos haciendo el amor, en esta ocasión era yo quien me encontraba sobre ella, llevando el ritmo del momento, pues ella había insistido en que yo también debía experimentar lo que era estar en control de la situación, y hacer lo que deseara y me gustara mas, además de que le excitaba mucho verme hacer con ella lo que quería. Justo cuando le pedí que tomara de nuevo el control y me encontraba de nuevo disfrutando bajo su cuerpo, una melodía de terror invadió la habitación, era mi celular el que sonaba.

—¿Justo en este momento se le ocurre llamar?— dije frustrada sintiendo como Camila se detenía

—¿Sabes quién es?— pregunto frunciendo el ceño

—Ese tono de llamada se lo puse exclusivamente a Austin— ella rio

—¿Carmina Burana?— pregunto justo cuando la melodía se dejo de escuchar

—¿Qué esperabas, alguna canción de amor? Después de lo que ha hecho Austin me pareció la melodía indicada— ella volvió a reír, mi celular volvió a sonar y yo fruncí el ceño —no lo pienso atender— Camila me miro y su mirada cambio a una de total misterio

—Tú no, pero yo si— yo abrí los ojos sorprendida y vi como Camila estiraba un brazo y tomaba el celular de su mesita de noche

—¡Espera Camila! ¿Qué piensas hacer?— ella me ignoro y apretó el botón de alta voz

—¿Hola?— atendió con voz algo grave aun estando sobre mí, yo la mire asustada, al otro lado se escucho un breve silencio

—¿Quién habla?— la voz de Austin se escucho autoritaria —¿Y qué demonios hace usted con el celular de Lauren?—

—Buenas noches a usted también, Lauren está en el baño en estos momentos, por eso conteste su celular— Camila sonrió y me guiño un ojo

—¿Quién es usted y que hace a esta hora con mi novia?— exigió, Camila levanto una ceja

—Su novia— dijo Camila molesta —en estos momentos está teniendo una cena de negocios muy importante conmigo, así que no se preocupe, ella es una muy mujer integra y nunca sería capaz de engañar a nadie… al menos que se lo mereciera por supuesto, ¿Quién no lo haría?— hubo silencio de nuevo por un rato

—No sé qué demonios está queriendo decir y no me importa una mierda, comuníqueme ahora mismo con Lauren— Camila volvió a sonreír

—Ya se lo dije, está en el baño, va a tener que esperar un momento, ¿O pretende que vaya a buscarla al tocador?—

—¡No diga estupideces! Más le vale que no intente propasarse con ella o le romperé la cara, además tengo la leve sensación de que usted me está tomando el pelo— Camila levanto de nuevo una ceja y sonrió con malicia, al instante me acaricio suavemente un pezón, yo cerré la boca con fuerza para no gemir justo en ese momento

—Por supuesto que no, yo nunca haría nada… que ella no quisiera— continúo y ahora me masajeo un pecho         

—¡Maldita imbécile, está tratando de pasarse de lista conmigo! Páseme a Lauren— grito Austin

—Creo que es usted el que está viendo cosas donde no las hay, dicen por ahí que el ladrón juzga por su condición, ¿Acaso es ese su caso? Porque está exagerando demasiado las cosas y me está juzgando sin conocerme, no me gusta nada la forma en que me está tratando y creo que lo mejor será decirle a Lauren que no hagamos ningún negocio, no quiero novios psicópatas armándome escándalos cada vez que me reúna con ella— ahora Camila puso una voz más seria y molesta, pero sus ojos me decían lo divertida que encontraba la situación, yo sonreí Austin debía sentirse en aprietos —¡por fin volvió señorita Lauren!— fingió recién verme —está al teléfono alguien que dice ser su novio, que por cierto es bastante mal educado, así ya mismo le entrego su celular... pero antes déjeme decirle algo señor descortés— volvió a hablar con Austin —su inseguridad con respecto a la fidelidad de Lauren demuestra que usted no tienen ningún control sobre su relación, o simplemente la está juzgando basándose en sus propios errores y eso señor, no habla muy bien de usted… señorita Lauren la dejo un momento para que hable a solas— y riendo totalmente divertida por su brillante actuación me entrego el celular, yo aclare un poco mi garganta y controle las ganas que tenía de reírme antes de hablar