Mi nuevo Roomie (Roomie 2)

Parte 54

Una semana, una semana faltaba para tener veinte años, wow creo que el tiempo se había ido volando.

Mientras estaba en casa de Matt junto a Jason planeando los últimos detalles.

-¿Y Matt?, debería estar ayudándome con esto - dije mirando a Jason

-Fue a comprar unas cosas  - contestó encogiéndose de hombros

-Ajá, y mientras tanto yo debo quedarme con todo este estrés - rodé los ojos

-Bueno, yo sé una manera de quitártelo - me miró pícaramente

-¿Ah sí? ¿cómo? - dije siguiéndole el juego

Se acercó a mí y me susurró al oído.

-Ven, ya te lo enseño - su voz ronca hizo que de pronto mis piernas se convirtieran en gelatina.

No pude contestar, solo tomé su mano y lo seguí arriba. Entramos a su habitación.

-Noto como toda tu tensión está aquí- dijo detrás de mí, suavemente susurrándome en la oreja, comenzó a masajear mi cuello al mismo tiempo que sus besos se dispersaban desde mi oreja hasta mi lóbulo, robándome un suspiro

-Jaso... - traté de decir pero inmediatamente me calló

-Shhh - comenzó a quitarme la blusa por encima de la cabeza, dejando al descubierto mi brasier negro de encaje - adoro tu brasier... - dijo besando el valle de mis senos - como no tienes una idea

Sus labios comenzaron a recorrer mi ombligo haciendo que involuntariamente mi cabeza se echara hacia atrás. Comenzó a desabotonar mi pantalón, quitándomelo por completo haciendo que quedará solamente en ropa interior, que era a juego. Se levanto tomándome de las caderas para llevarme a su cama, cuando mi espalda estaba sobre ella, Jason no tardó en abrirse pasó entre mis piernas, me levante con los codos y comencé a sacarle la camisa y la tire al suelo, sus labios comenzaron a danzar ferozmente sobre los míos.

-Eres tan sexi - dijo desabrochando mi brasier para comenzar a lamer y succionar uno de mis pechos robándome un fuerte gemido, mi excitación cada vez se hacía más alta

-Ya.. no puedo - dije con mi respiración pesada, lo mire, aquellos ojos cafés estaban negros de la excitación, me paré y fui al cajón donde sabía que él guardaba lo preservativos, tome uno y me dirigí de nuevo hacia la cama caminando de rodillas

-¿Qué estas tramando pequeña? - dijo con una voz ronca que hizo que mi piel se hiciera de gallina

Abrí el preservativo y comencé a quitarle el short, luego tomé el elástico de sus bóxer y los baje lentamente, siempre mirándolo, notaba como sus manos se aferraban a los costados de la sábana, tome el preservativo y comencé a bajarlo por su miembro con mi boca.

-Mierda - su mano voló a mi nuca jalando mi pelo suavemente, comencé a subir mis labios por su miembro y con mi mano derecha hice lo mismo, cada vez iba aumentando más el ritmo - no pares - notaba como sus ojos estaban cerrados

De un momento a otro me tomó de las caderas poniendo mi espalda contra la cama, estando él entre mis piernas.

-Pensaba que era yo quien te iba a relajar - dijo con una sonrisa pícara, tomó su miembro y de una estocada entro en mí.

-Jason - gemí fuertemente agarrándome de su espalda

la sensación era puro placer, que hacia que mi espalda se curveará y mi mente se desconectara completamente de mi cerebro, haciéndome soltar palabras obscenas sin que yo lo pensará.

Comenzó a moverse rápidamente, afuera, a dentro. En la habitación solo se podía oír el sonido de nuestros cuerpos moviéndose lo cuál era más excitante.