Capítulo 44

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A la mañana siguiente el primero en despertar fue el joven semental, seguido su amigo el pez. Ambos discutían sobre sus posibles vestuarios sin dar algún detalle que revelase la identidad que representarían.

A su vez la chica pelinegra salía de su habitación con su blusa traslúcida y un boxers femenino que daba a relucir su figura.

La muchacha avanzaba hacia ellos aún bostezando y rascandose un ojo.

El primero en hablar fue el más alto de los dos hombres ahí presentes.

– A-Aries...tu ropa

La mujer solo miró al semental y luego miro su ropa para acto seguido regresar a su cuarto a la vez que le replicaba sobre su vestimenta.

– ¡Ah!, Pero si fuera Acuario no dices nada, verdad? – protestó al mismo tiempo que daba un portazo.

Ambos jóvenes se miraron el pez solo miraba de manera burlona a su acompañante mientras que el semental tenía una de sus manos tratando de ocultar su apenado rostro.

– Sabes que Piscis, continua bajando – resongó el chico mientras que le dió el paso a su amigo, a lo que esté solo soltó una pequeña carcajada.

Más alrato el gran toro bajó las escaleras, traía puesto un pescador holgado a la altura de la rodilla y una camiseta gris que enmarcaba su musculatura.

Se dirigió a la cocina, se preparó un par de sandwiches y se sentó en uno de los mullidos sillones a ver la partida que los otros dos chicos habían comenzado hace ya un rato.

Cuando se disponía a comer su tercer sandwich bajo chispita (osea Aries) ya vestida alegando que iba a salir y que regresaría poco después de la comida, no sin antes robarle el sandwich que Tauro tenía en su mano causando molestía a este

– ¡Oye! – protestó desde el sillón.

– Tu tienes otros dos ¿De qué te quejas? – decía para acto seguido cerrar la puerta tras de sí.


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⏰ Last updated: Jan 23, 2020 ⏰

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Virgo. La Mujer que No Podía Amar.Where stories live. Discover now