Sr & Sra Clark

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Narrador John.

-Tienes que ayudarme John.-Nieto con la cabeza y dejo que pase.

-No voy hacer más nada Laia.-digo esta respira hondo.-He intentado de todas las maneras hablar con ella en este mes y solo he recibido rechazos y desprecios. Creo que no he matado a nadie, solo ayude a una persona y aquí el que tendría que rechazarla y hacer desprecios soy yo. Me oculto a mi hija un año, me perdí el primer año de vida de mi hija y eso ella no lo ve mal, por que claro lo hizo ella. Me rindo Laia, me rindo con Mía Jones.-esta cierra los ojos y se toca la cara con las manos.

-Va ha cometer el mayor error.-dice y yo suspiro mientras asiento.

-Ese tío no es bueno, se lo veo a kilómetros pero ya no podemos hacer más nada. Ella ha decidido casarse con un hombre al que no ama para vengarse de mi. Y lo peor es que si me quería hacer daño, lo está consiguiendo.

Narradora Mía.

-Estás preciosa.-dice Hector cuando estoy a su lado y le sonrió.

-Podéis sentaros.-dice el cura y todos le hacemos caso.

-Os declaró marido y mujer, puedes besar a la novia.-Hector sonríe y se acerca a mi une nuestros labio y no siento nada. Frunzo el ceño separándome y este me agarra de mano fuerte.

-Mas te vale sonreír y aparentar que eres feliz.-se gira y tira de mi. Haciendo que yo me sienta confundida.

Miro a todo el mundo mientras bailan y yo respiro hondo. ¿Por que soy incapaz de bailar y disfrutar de mi boda?

Alguien se sienta a mi lado sacándome de mis pensamientos y me pongo seria al ver a Hector.

-Prepara las cosas porque nos vamos.-dice serio y yo frunzo el ceño.

-¿A donde?.-pregunto confundida y este me mira con molestia.

-A nuestra luna de miel.-dice bebiendo de su copa.

-Es mañana cuando vamos a nuestra luna de miel.-digo y este me mira de nuevo.

-Se me olvido decirte que lo adelante para hoy. Ahora hazme caso y ve a por tus cosas, no montes un escándalo.-se gira y empieza andar para reunirse que los invitados.

Llegamos al hotel después de dos horas de viaje y suspiro al sentarme en la cama realmente cansada.

-Voy a ducharme, estoy muy cansada.-digo quitándome los tacones. De repente Hector tira de mi brazo pegándome a él y yo abro los ojos sorprendida.

-Esta noche volverás a ser mia.-dice muy cerca de mi y une nuestros labios. Me aparto de él y niego.

-Estoy cansada Hector, ya te lo he dicho.-me vuelvo a girar pero este me empuja y me tira en la cama.

-Para acostarte con tu querido John nunca estabas cansada.-dice de repente y no puedo evitar estampar mi mano en su cara. Este se abalanza sobre mi y empieza a desvestirme.

-¡Para!.-grito y este sigue sin hacerme caso. Consigo hacer fuerza y apartarlo de mi pero este es mucho más fuerte y termina impactando su mano en mi cara.

-Esta noche vas a ser mia, esta y todas las del resto de tu vida.-Siento como mis ojos se llenan de lagrimas pero no hago nada para evitar que esté entre en mí bruscamente por el miedo de que vuelva a pegarme.