SEÑOR JEON: KOOKV°°

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La noche y el frío habían caído sobre Seúl. Jeon Jungkook llevaba horas intentándose comunicar al número que le correspondía a su empleado.

  — ¡113 llamadas y 160 mensajes y no se ha dignado a contestar! — Gruñó con gran desespero caminando hacia su pequeña repisa dónde guardaba su amado y preciado Whisky — ¡Se largo de la maldita empresa sin siquiera decirme nada! —.

Tomó un pequeño vaso de cristal con hielos y vertió sobre éste un poco del oscuro líquido, para después beberlo con gran rapidez y brusquedad.

  — ¡Ese maldito imbécil! ¿Qué estaba pensando cuanto hizo aquello? ¿Creyó que se salvaría de mí? ¿¡Cómo es que se ha atrevido a abandonarme!? —.

Luego de gruñir esto, su contrario; el mayor de los Jeon, torció su ojos y dio un gran y pesado suspiro, era la milésima vez que su hermano menor se quejaba y preguntaba en voz alta sobre el secretario; aquello comenzaba hacer frustrante y agotador.

  — Jungkookie, por favor guarda la calma... Taehyung es un muchacho responsable... Tal vez se le presentó un inconveniente — Habló Jin caminando hacia la puerta que aún permanecía abierta.

Al escuchar esto, los ojos del menos se torcieron, sabía que tenía razón, pero que aquello no justificaba el hecho de que no contestará sus llamadas o mensajes.

  — Tal vez se largó con el maldito de Hoseok — Gruño furioso mientras vertía más de aquél liquido sobre su vaso — El muy estúpido terminó sus cursos... Ahora no me sorprendería que volviera con sus malditos encantos sobre Tae —.

Aquello hizo que el más alto soltará una risa nasal.

"¿De verdad acababa de decir aquello?"

  — Jungkook... Acaso tú... ¿Estas celoso? — Mismas palabras que hicieron que las mejillas del menor se tornaran de color rosado y lo obligarán a desviar la mirada que tenía puesta en su hermano.

  — N-no son celos, hyung — Bebió una vez más del liquido — S-sólo no me gusta... No me gusta que Jung mueva la cola por mi empleado... Además a Taehyung no es su tipo —.

  — Aja ¿Y tú sí lo eres? — Sonrió con sarcasmo el mayor — Ambos sabemos que estas celoso, pero esta bien lo no lo admitas, soy bueno guardando secretos — Luego de decir aquello el más alto caminó hasta la puerta — Te esperó en casa, Jungkookie, por favor no llegues tarde y deja de acosar a Tae — Y después se retiró sin dejar contestar a su pequeño hermano.

Una vez que el ahora castaño se retiró de aquella oficina, Jungkook dejó caer con gran pesadez su cuerpo sobre el oscuro sofá que se encontraba en el salón, estaba agotado y fastidiado; eso agregando que el pequeño castaño había huido de la empresa. Volvió a tomar su teléfono y se dispuso a volver a llamar, sin embargo, aquella pequeña figura tan pálida y de cabello negro lo sorprendió observándolo en silencio desde el margen de la puerta.

  — ¿Qué haces aquí? — Preguntó con brusquedad el más alto bebiendo de su preciado Whisky.

  — Vine a verte como lo hacen una mujer con su prometido, mi amor — Respondió la pelinegra caminando de una forma sensual haciendo un pequeño ruido con el con el pisar de sus altos tacones.

  — Creí haberte dejado claro hace días que esto ya se había terminado, Lee — Respondió con frialdad volviendo a marcar aquél número — Largate o llamaré a seguridad —.

La pelinegra arqueó una ceja al escuchar dichas palabras; era normal que Jungkook reaccionará de tal forma después de haberse enterado de aquello, sin embargo, ella no desistiría tan fácil, había soportado peores tratos provenientes de personas menos importantes.