All This Years [JULIANTINA]

Quinto año

Juliana no quería admitirlo, pero extrañaba a Valentina.

Siendo ya su quinto año en la escuela, odiaba aceptar que se había acostumbrado a tener a Valentina como su compañera de puesto y a Robín Byres rondando cerca del escritorio para conversar con su mejor amiga.

Ese año habían ingresado dos niños nuevos a clase y ella quiso creer que no podía ser tan malo cuando a uno de ellos le asignaron el lugar junto suyo. Es decir, un niño es mucho mejor que una niña parlanchina, ¿cierto?.
Sin embargo, en cuanto al segundo chico nuevo lo sentaron en el escritorio de al frente y comenzó a codearse con su compañero, supo que estaba equivocada: Dos chicos demasiado problemáticos eran por mucho peor que una niña parlanchina.

Al principio eran conversaciónes distintas y simples, sobre deportes y videojuegos. Lamentablemente para sus sensibles oídos, los cuchichear se hicieron más molestos cuando comenzaron a hablar de chicas, ¿y quién era, según ellos, la chica más linda de la clase?: Valentina Carvajal, por supuesto. Y cuando ambos llegaron a la misma conclusión, Juliana vio salir chispas de los ojos de ambas: los recién declarados amigos para toda la vida quedaron la bandeja de paz para comenzar a pelear, poco a poco, por el amor de la chica de sus sueños.

Comenzaron con comentarios inocentes. Billy, su compañero de puesto, diría algo como: "Valentina se vería bien con un buen deportista y caballero", siendo Steve todo lo contrario a su descripción. Entonces Steve diría algo como: "Valentina ama leer, le vendría bien alguien intelectual", sabiendo que su amigo era malo en todo a lo que involucraba lectura.
Entonces los comentarios se volvieron más bien guerra y Juliana tenía que ver cómo constantemente ambos tirabab de una cuerda.

"Nadie irá por Valentina", había sido el acuerdo en cuanto ambos se enteraron de su interés que compartían un interés amoroso por la misma chica, pero era evidente de que ninguno planeaba cumplirlo. Juliana no lo admitía, pero consideraba incluso cómico que esos chicos intentarán sacarse los ojos el un al otro mientras Valentina no estaba ni enterada de los estragos que causaba en esos jóvenes corazones.

Las peleas se volvieron más constantes, llegando incluso a golpes. Billy tomaría fotos de Valentina a escondidas y Steve se quedaría por faltar a su palabra, pues se suponía que ambas debían de compartirlo todo sobre ella.
Ambos habían comenzado a tironear del teléfono debido a unas simples fotos y Juliana estaba a punto de perder los nervios por culpa de ellos, ¿cómo podían pelearse por una chica?, ¿qué tenía de bueno Valentina?

— Hey, Juls, ¿me prestas tu cuaderno de lenguaje? — y ahí estaba la protagonista del conflictivo trío amoroso, sonriendo sin enterarse de nada mientras ponía sus ojos de borrego a medio morir — Es que no he alcanzado a escribirlo todo — he hizo un adorable puchero a la menor.

— Pídeselo a Robín — fue su breve respuesta mientras revisaba su celular, pues odiaba cuando Valentina comenzaba a usar ese meloso tonito de voz con ella.

— No entiendo su letra — Juliana suspiró con fastidio, tomando su mochila para buscar el cuaderno que acababa de guardar.

— ¡Yo puedo prestartelo! — Billy no tardó en sacar provecho de la situación, extendiendole su cuaderno — He tomado apuntes de absolutamente todo — aseguró

— Pero su caligrafía tampoco es muy buena, ¿sabes? — hablo con fingido tono inocente Steve, extendiendo su cuaderno hacia la castaña — Ten, te presto el mío, ¡de seguro es mucho mejor!

Valentina miro entre ambos chicos, sin saber que hacer, y detuvo su mirada en Juliana que ya había sacado su cuaderno y miraba a sus compañeros como si fueran un par de fenómenos.