Oh, Godness! | 𝒢𝑒𝓃𝑒 𝒢𝒶𝓁𝓁𝒶𝑔𝒽𝑒𝓇

Killer Queen

Lennon y yo tuvimos una comida agradable. Había conocido a una chica en un festival que se llamaba Alex, y yo estaba muy emocionada por él y por conocerla a ella. Lennon la había invitado a cenar y quería que me quedara a conocerla.

Di pequeños saltos en mi silla — ¡No me creo que le guste Gorillaz y se junte con un Gallagher! ¡Tenemos tanto en común!

Lennon sonrió — Es muy importante para mí que te lleves bien con ella.

— Lo sé, Lenny, tú no te preocupes por eso. De momento va bien.

Al llegar a casa, Liam ya estaba ahí. Al entrar, me revolvió el pelo y me dio un beso en la frente y a Lennon una palmada en la espalda.

Nos sentamos a hablar con su padre sobre esta noche y me ofrecí a ayudar a Liam a cocinar — ¡Eres un amor, definitivamente! — Exclamó con su tremendo acento británico— pero no es necesario cielo, Lennon me ayudará porque cocinaremos para sus preciosas invitadas.

Reí sonrojada.

— ¿Has invitado a alguien más a parte de Alex, papá?— Le di un juguetón puñetazo en el hombro y le saqué la lengua, lo que me respondió.— De todas maneras, prácticamente vives aquí, te pasas el día aquí. Parece que no tienes casa.

Y así es como Lennon y yo empezábamos a pincharnos y usualmente terminábamos con golpes cariñosos y no tan cariñosos.

A las dos horas más o menos de la llegada de ambos tras la comida, llegó Gene, con un bonito - nótese mi sarcasmo -  juego de chupetones en todo el jodido cuello.

— Hola — se sentó a la mesa con los tres.

— Gene, hoy viene a cenar la novia de Lennon —explicó Liam—, ¿por qué no invitas a tu amiguita también?

Sentía un pinchazo en el pecho, era realmente doloroso.

Lennon y Gene trataban de convencerlo con argumentos como "No es buena idea" o "La noche era para que conozcáis a Alex únicamente". Pero como buen Gallagher, no paró de insistir hasta que Gene cogió el teléfono y le marcó. Mientras se llevaba el teléfono a la oreja me miró durante dos segundos de manera entristecida.

Se fue a la cocina para hablar y así nadie pudo escuchar su conversación. Todo se quedó en silencio hasta que volvió.

— ¿Y bien? — Preguntó Liam.

Yo ya me había mordido todas las uñas de mis manos y estaba empezando a ponerme más nerviosa, me sudaban las manos.

— Está aquí en veinte minutos.

— ¡Cazzo! —No pude evitar exclamar

— ¿Ocurre algo, Bella?— Preguntó Liam.

— ¡Sí! Sí,... yo... olvidé que tenía muchísimos deberes y, uy estoy muy ocupado,... digo, ocupada.

Al ponerme tan nerviosa, el acento Italiano se me hizo más presente, era como si de repente no pudiera hablar el Inglés de nuevo correctamente.

— ¿Seguro, niñita?

— ¡Sí! — Exclamé.

— ¡No! — Exclamó Lennon.— Vamos a hablar Pavarotti.

Rodé los ojos y fuimos a la cocina.

— Hey, ibas a conocer a Alex. Realmente es importante para mí, te lo compensaré como tú quieras, lo prometo.

— Es en serio, realmente tengo muuuuuuchos deberes.— Mentí.

— Estás haciendo la cosa — Apuntó mi cara con su dedo índice.

— ¿La co-? ¿La cosa? ¿Qué cosa?