2 - [No lo entiendo]

144 12 4
                                    

El cambio esconde dos caras, pero el miedo se instala sin importar nada.

Perder a un ser amado es de las cosas que se ha estado construyendo como uno de los dolores más espantosos que uno al ser un ser vivo mundano puede experimentar. Muchas veces se repite la misma historia que día con día, sin saberlo, nosotros impulsamos el inicio, eso de "no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes" es una vaga y antigua frase con grandes significados ocultos siendo canalizadas por infinitas versiones que sin duda en un futuro su camino seguirá sin fin.

Al pensar en alguien valiente, perspicaz y positivo de inmediato se les venía a la mente una imagen que poco a poco iba siendo tallada por los mismos habitantes que alguna vez fueron unos completos hipócritas no aceptando una ayuda amistosa de un foráneo tan llamativo de manera simple. Por supuesto que ahora se daban cuenta, del gran error al otorgarles todas sus esperanzas en solo un gran ejemplar, ese era el precio por su egoísmo después de ser sentirse tan cómodos como para que a nadie le importase si al lado un completo caos se desarrollaba, pues a fin de cuentas, él junto a sus amigos iban a salvar el día y ya, todos contentos.

Nada lo paraba.

Hasta la que se supone, era la policía, la cual no hacía más que parecer un novato queriendo ayudar con las pocas habilidades que poseían ellos, alejar a los civiles para que la destrucción no se llevara consigo víctimas inocentes y encargarse de erradicar a las criaturas con menos potencial mortal en su interior vacío. El orgullo fue perdido luego de su aparición.

Pero tampoco era motivo de fiesta el que su ida se haya vuelto realidad.

Con el tiempo sus enemigos fueron enterándose de la gran noticia que azotaba todas las esquinas del mundo, más del 90% del estorbo que simbolizaban había desaparecido y con ello dando una entrada a la victoria por primera vez en sus miserables vidas, ni siquiera las fuerzas armadas iban a servir para lo que se les vendría encima.

Era gracioso pensar que ciertos individuos estaban temerosos al segundo movimiento que los malditos autonombrados héroes de Mobius fueran apareciendo desde la sombra tan grande que había sido abandonada, pues entonces iban a actuar lo antes posible para dejar una marca antes de partir, sin embargo eso nunca paso.

Si, G.U.N era bien sabido por todos que poseían bajo su mandato las fuerzas armadas más poderosas después de las esmeraldas del caos juntas, su equipo conformado por soldados de alto grado mortal iban juntos como un gran número conformando un grupo absurdo ahora sin la característica huella azul ambos bandos se fueron creando de tal forma que esto se volviera una guerra silenciosamente extravagante.

Muchas cosas estaban cambiando, los ciudadanos ya no tenían algo al que venerar después de las victorias así que la atención se iba desviando en las actualizaciones de su mismo entorno, el entretenimiento socio-activo, los nuevos descubrimientos médicos y científicos.

Aunque la tecnología abarcaba gran parte de este sustituto, el nuevo gobierno siendo estratégicamente enlazado con esta importante organización además del incremento en la tasa de interés la cual afectaba directamente a la economía de cada país, problemas diferentes pero iguales en esencia, el ganar dinero para sobrevivir es algo que ya estaba hecho con el ligero cambio de que todo objeto con posibilidades en una venta había sumado un 50% más de valor en la gráfica del PIB potencial, era absurdo pero ¿A quién le interesa los problemas económico-políticos?

Si la población se quejaba por que los personajes poderosos se habían limpiado las manos construyendo una enorme estatua de ese equipo a modo de pago en la capital para que en cierta manera tuvieran un emotivo recuerdo eso no quitaba nada el hecho de que tanto poder ganado por los impuestos monetarios les fueran entregadas en bandeja de plata con el propósito de que tuvieran su ayuda para crear más secretos en su lejana zona con paso prohibido sin excepción.

[~SHADAMY~] - ღLa promesaღWhere stories live. Discover now