Capítulo 13: Una vuelta

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La oscuridad había rastrado a Maximus Carlos LeBlanc y en su última voluntad quería salvar a su hermana Luna que se veía igual que él caer en sus manos.

Querida Luna:

Se que te debes sentir destrozada y abandonada, culpable por mi muerte, culpable por haber estado en ese momento de seguro con el chico lobo, pero por lo mismo que sabía que estarías con él lo hice, tienes a alguien mejor que yo para sacarte de este pozo del que ya estaba hundido, tal vez si ese loco purista no quisiera mi poder a toda costa y de su lado  o matarme al ver que no me podía controlar o a Dumbledore también quererme para su fin de ganar y manejar, las cosas pudieron ser distintas, nuestra familia esta manchada por la sangre, matanza y muerte, espero con mucho amor que eso terminé cuando llegue tu primer bebé, que con esa criatura el amor reine nuevamente.

Seguramente culpes a Lupin, seguramente lo dejes, pero no puedes olvidar que cuando dejamos ir un amor es cuando nos desvanecemos. Mi mayor error fue nunca decirle en vida a Regulus cuanto lo amaba, mi error fue ocultar mis sentimientos, pero de todas formas él no se hubiera quedado conmigo, de seguro para sus diecisiete proclamen su compromiso con una lida chica sangre pura.

Pandora estará bien, seguirá con Xenophilius Lovegood, tendrán una hermosa niña, porque Pandora siempre ha querido una niña, le contará grandes historias de todas sus tías y tío, será tan inteligente como cada miembro de su familia, vivirán aventuras con las locuras de Xeno y será única como tu. Padora siempre supo aliviar mejor con la muerte que nosotros, no dependía de nadie y la consideraba como algo inevitable y un familiar más, por eso su loca obsesión con nuestra familia.

Esperó que nuestro reencuentro sea cuando tengas más de cien años, tengas nietos que extrañan tus galletas y tus regalos.

Vamos a jugar al escondite con Maya, Maggie y Makarena, debes encontrarnos, pero esta vez somos expertos en escondernos.

Te amo, lo siento por no soportar más, pero no quería una vida entera escondiendome.

Te amo, y lo siento por no llegar a ser ese maravilloso tío del que le contarás a tus hijos.

Te amo, nos vemos en unos años más Luny.


Luna terminó de leer la carta que cada día leía para recordar trepar y no caer en el pozo de la oscuridad y la depresión, era curioso como parecía más gemela de él que de Pandora, ese día leyó la carta en voz alta por segunda vez, se la leyó a Pandora a quien no le había contado de ella.


-Pandora..¿Por qué crees que nuestros padres no llamaron así?

Las hermanas Le Blanc estaban reunidas en la biblioteca escolar, sentadas cerca de la sección de cuentos infantiles. Luna leía un poco sobre la mitología griega y sus verdades cuando le confesó lo de la carta y decido en ese momento leerla para ella.

-¿Lo dices por que deje salir el mal de una jarra?

-Solo... curiosidad, nunca te haz preguntado qué tan diferentes serían nuestras vidas con la intervención de nuestros padres

-No, en realidad no, nunca me he cuestionado eso. Lunita, ¿te encuentras bien?

-Por supuesto que si. Pero ya debo ir marchando. Hay partido de Slytherin v/s Gryffindor

-¿Juego amistoso?

-Entre ellos nunca existen juegos amistosos, pero ir a ver el juego me mantiene en los márgenes de normalidad y pensar en otras cosas.

Hermanas LeBlanc  [Primera Generación] (Terminada)Where stories live. Discover now