Tan cerca de tí

50 7 1
                                    

YoonGi

Todo lo que hacía por él era por el hecho de que lo quería tanto como no se imaginaba. ¿Pero por qué me estaba ignorando? ¿Qué no sabe acaso que eso me lastima? Tal vez no, de seguro todas mis muestras de cariño hacia él no significaban nada. Es que no podía parar de verlo, enfocar mi mirada en aquellos ojos marrones carmín era como ver al cielo oscurecido, florecido de estrellas en donde cualquiera se perdería. Su cabello que la mayoría de las veces estaba palidecido de un blanco amarillento tan lacio, colgaba de la raíz de su cabeza, daba tentaciones de tocarlo, de sentir su suavidad con mis propias manos. Su aspecto varonil era tan enigmático, perfectamente creado que cualquiera se mordería los labios de verlo, como justamente me pasaba a mí.

Las facciones de su rostro, lo que daba por pasear las yemas de mis dedos por ellas dibujándolo una y otra vez como lo hacía con mi propia imaginación. Su corazón tan noble y tierno, tan dulce y con bellos sentimientos no era algo que muchos tuviesen.

A mí me gustaba todo, absolutamente todo, pero no podía suceder nada más cuando Jimin solo me ignoraba y hasta repudiaba todas mis caricias. Quién sabe si hasta el propio amor que le tenía le disgustaba.

Aquel hombre que tenía seguidamente en mis sueños durmiendo a mi lado, o pasando momentos conmigo se había convertido en una meta inalcanzable. "Oh por Dios Jimin, al menos deja de parecerme tan lindo." Dije para mí mismo suspirando alargadamente.

—¿Qué tienes?—

No se ha dónde exactamente me quedé pero esa, ¿había sido realmente una pregunta de mi Jimin? Quería fingir estar más triste para que se preocupara por mí. Tal vez se animaría a darme un abrazo por su cuenta así que me quedé en silencio.

Soy demasiado caprichoso, ¿verdad?

—Anda, no te quedes en silencio YoonGi, sé que tienes algo.—Insistió soltando el libro que estaba leyendo para ponerlo sobre su mesita de noche y yo volví a no decir nada.

—Bien si no quieres decirme quizás un abrazo pueda resolverlo.—Dijo mientras rápidamente puse mi mirada en él que se levantaba de su cama en dirección a la mía. Mi corazón se aceleró, latía tan rápido que pronto haría un agujero en mi pecho. Estoy soñando otra ve...

—Perdóname pequeño, soy un tonto.—Dijo lanzándose sobre mí para abrazarme y no pude evitar soltar algunas lágrimas, no podía creerlo.—Mírame, hasta tengo orejas de burro.—Dijo soltando una risilla mientras me miró fijamente.

—La diferencia es que soy una persona y puede disculparse de sus errores.—

No me contuve más.

—¿M-me dijiste "pequeño"?—Solté tartamudeando, había sido de cariño, una muestra de cariño.

—Si es que eso eres, un pequeño minion, nada más te falta ser amarillo.—Aclaró riéndose mientras me tomó de las mejillas apachurrando mis cachetes, sentí como al instante mis mejillas se habían puesto un poco rosadas y él sonrió.

—Oye...—Susurré

—Si dime pequeño minion.—Volvió a llamarme así y yo ya sentía aquellas mariposas sobrevolarme. Pero no aguanté más hasta que me tumbé yo sobre su cuerpo despaldas a la cama. Él me miraba fijamente a los ojos casi sin pestañear y yo apoyaba mis manos sobre la cama para no aplastarlo con mi peso.

—¿Me dejas dormir contigo?—Le pregunté notando como al instante sus mejillas también estaban rosadas. Yo le hacía sentir cosas.

Si, yo.

—S-si pues claro por qué no.—Dijo tartamudeando.

—¿Me dejas?—Insistí pero él no sabía para qué le estaba pidiendo permiso. Ese era el punto.

Cruel Amor [YoonMin]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant