"Sin darse cuenta, Scrooge toma un rol importante en la vida de Donald."
día 1. vida doméstica/paternidad.Inicialmente, Scrooge lo había visto como una labor complicada.
Él no se consideraba bueno con los niños a diferencia de sus hermanas, por lo que lo tomó desprevenido cuando Hortense le confió a Donald mientras Quackmore y ella llevaban a Della al pediatra después de caer enferma.
Matilda se encontraba en Escocia, pero Elvira se encontraba a las afueras de Duckburg, por lo que aún desconocía porque su hermana más joven lo había sorprendido a él con la labor de cuidar a su hijo.
No obstante, ahora que se encontraba en ella, no tenía ningún problema. Quackmore había insistido de más con los respectivos cuidados que un infante de nueve meses necesitaba, siendo muy específico en vigilarlo cuando lo bajara de la cuna argumentando que era muy rápido al gatear, y siendo el padre sobreprotector que era no quería que nada le pasará a su patito.
Por supuesto, él nunca se había sentido tan insultado al ser considerado no calificado para cuidar a un bebé, pero podría presumir con orgullo que no le causaba ningún altercado.
Literalmente. Mientras contaba sus monedas, de vez en cuando observaba al niño en la cuna jugando con sus patas palmeadas, balbuceando con el chupón en su pico o alzando sus manitas hacia el móvil marítimo que había instalado.
El pato mayor sonreía ladinamente al ver a su sobrino tan juguetón siendo comúnmente berrinchudo, y siguió contando sus monedas, inconsciente de la mirada brillante y alegre que le tendía el pequeño Donald, así como de su manera de apoyarse en el colchón para intentar ponerse de pie.
—Tres mil doscientos cincuenta, tres mil doscientos cincuenta y uno... —un gorjeo se escuchó, y el pato escocés sonrió con cariño—. Ahora no, Donnie. Tu tío Scrooge está muy ocupado. Tres mil doscientos cincuenta y dos...
Donald sujetó los barrotes de la cuna manteniendo el chupón y comenzó a dar pequeños saltos, intentando llamar la atención de su tío con gorjeos y balbuceos.
—¡Hmm! —exclamó, de pronto temeroso de que el mayor no pudiera oírlo y siguió intentando saltar, intentando bajar de la cuna y asegurarse de que estaba en lo incorrecto.
Sin embargo, eso tampoco pareció llamar la atención del adulto...
—Podemos jugar tan pronto termine, sólo sé paciente.
¡...y ser paciente es lo peor que le podían decir! Donald sintió el impulso de llorar, extendiendo ambos brazos hacia Scrooge, soltando los barrotes y cayendo sobre su trasero cuando sus piernas no pudieron soportar el repentino peso extra.
—¡Pa...! —alzó la voz tan pronto pudo, sintiendo el chupón caer y comenzando a llorar consecuentemente.
Siendo así cómo Scrooge sintió los engranajes de su cerebro fallar. Desinteresado en si perdía la cuenta, se alzó de su escritorio caminando precipitadamente por el estudio, apoyándose de su bastón para evitar tropezar.
Su respiración se había cortado por un segundo.
—¿...Qué dijiste? —cuestionó en un hilo de voz, desconcertado ante el arrebato del infante. No dudó en soltar su bastón para apoyarse en la cuna y así tomarlo, viéndolo patalear—. ¿Qué dijiste, pequeño Donnie?
Sintió el repiqueteo de su corazón en su pecho tan pronto la mirada lacrimosa del patito se enfocó en él.
—¡Papa! —las lágrimas bañaban el plumaje amarillento del niño en un llamado desesperado. Tan pronto sintió el calor de su tío, se aferró a su abrigo sin dejar de llorar—. Pa...

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Me Kin ┋ Duckverse
Fanfiction❝A pesar de todas las contrariedades, Scrooge McDuck estaba seguro de algo: amaba a Donald incondicionalmente. Porque era familia. Su familia.❞ ❪ Team Uncle Week ❫ © don rosa, carl barks ﹠ walt disney. fanart © domiinon.