3

14 1 1
                                    

El autobús va muy despacio, no todos los lugares están ocupados

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El autobús va muy despacio, no todos los lugares están ocupados. El chofer dejo su estación de noticias para tenernos al tanto. Pero mi atención está en algo más, la pequeña nota que Nathan me hizo llegar.

No he podido dejar de leerla, o quizás no he querido dejarla. Contemplo la caligrafía y la tinta negra, acaricio una de las esquinas con el pulgar. Sólo había visto aquel chico una vez, en una situación poco crítica, donde su madre se perdió y término llegando a la florería. A lo mejor el destino quiso que así fuera nuestro primer encuentro, porque seguramente habrá más, en los que Nathan me haría sentir especial.

Me siento un poco mal por no haberlo conocido antes, y creo no ser la única, Nathan trae consigo varios atributos que lo pueden convertir en un chico perfecto, no tanto por lo físico, si no por lo que tiene en su interior, con esto me refiero a sus sentimientos. Unos sentimientos tan puros que se juntan con el gran deseo de demostrar que es capaz de amar.

¿Cómo un chico tan guapo y de buen corazón pasa desapercibido?

Quizás sea por su hermano. Cameron entra al club de aquellos chicos que narran en algunas historias de amor o películas, chicos que mantienen una relación complicada o toxica con la protagonista, dejando de lado el amor de verdad para dar paso al drama y tragedia.

¿Dónde quedo el romance real? ¿Dónde está el amor bonito que todos soñamos con tener?

El autobús para en seco, haciendo que unos cuantos cabecearan. Aparto la mirada del papel, para averiguar lo que estaba ocurriendo, después de unos segundos, se escuchan las fuertes pisadas de otro pasajero, el cual casi se golpea con la diminuta puerta del transporte.

Cuando arranco el autobús, deje de mirar para volver a lo mío.

-Disculpa...

Aquella voz...

-¿Está ocupado el asiento?

Me limito a negar con la cabeza y a guardar la nota en mi mochila, rezando un mi interior para que Nathan no haya visto lo que tenía en manos. Dios, debía de tratarse de una broma.

Nathan como pude se sentó, pero sus piernas impedían que tomara una buena postura, aun así no mostro molestia alguna.

-¿Eres amiga de mi hermano?

-Sólo soy una compañera – respondo con timidez – ambos sabemos que tu hermano tiene obligaciones con sus amigas.

Ahí estaba, aquel corazón puro y sincero, tenerlo así de cerca me hace sentir tan bien. Es una calidez que no había llegado a sentir.

-Para ser sólo una compañera lo conoces bastante – trata de hablar con frialdad. Pero por dentro no hay hielo.

-Todos conocemos a Cameron – digo con burla – varias chicas mueren por ser parte de su grupo.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jul 20, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Las Rosas de CupidoWhere stories live. Discover now