Parte 4

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Paralizada por el miedo Elva suelta el papel, y mira el espejo estaba húmedo por el agua caliente del grifo. Se quedó mirándolo fijamente. Hasta que algo comenzó a escribir en él...

ELLA ES MIA ELLA ES MIA ELLA ES MIA ELLA ES MIA ELLA ES MIA ELLA ES MIA ELLA ES MIA.

No podía ser, después de tantos años estudiando sobre eso, escuchando las supuestas locuras de sus pacientes, no podia ser posible, cómo era posible.

Estaba parada ahí inmóvil, sin hacer nada,  hasta que el grifo del agua se volvió a abrir y el agua caliente comenzó a empañar el espejo. Muerta de miedo seco el espejo... hasta que un reflejo apareció en el, tenía la cara deforme y un aspecto como podrido... ella gritó, cogio su celular y salió corriendo de la casa.

Llamó a su marido por teléfono aterrada, sin poder hablar casi, sin saber que le iba a decir.

Edward... Edward dónde estas???
Le preguntó

- Voy camino a casa con Hanna, estás bien??? Le respondió con una voz seria.

Eyy escuchame, escuchame bien, Hanna tenia razón, hay... hay algo en la casa. Le dijo tartamudeando y muerta de miedo.

- ¿Por favor Elva no me digas que vas a caer en esos juegos mentales?

Respondió muy molesto. Hanna empezó a mirarle muy preocupada, no sabia de lo que estaban hablando, pero tenía idea. Sea lo que fuera que la estuviera atormentando a ella, tambien estaba atrás de sus padres.
Pero ella no decía nada... sólo se quedaba ahí callada, escuchando a su padre hablar muy preocupado.

Escúchame Edward, me da igual si me cres o no, pero sea lo que sea esa cosa, no nos quiere ni a ti ni a mi... quiere a Hanna. En ese momento se cortó la llamada, un sonido irritante comenzó a sonar en el teléfono de Edward.

Alguien está conmigo: Regresa a CasaWhere stories live. Discover now