Capítulo 43

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Cerró el espejo de su baño el cual también contenía un espacio hueco para guardar cosas en su interior, sacó dos analgésicos los cuales se tomó rápidamente para alivianar el dolor de su quijada lo antes posible. Ya no podía soportarlo más, le dolía como el infierno.

Miró su reflejo en el cristal y pudo percatarse de las horribles manchanchas moradas casi negras en su mandíbula las cuales debía tapar con maquillaje antes de ir a trabajar, Chang Bin le había pegado muy fuerte, y para la mala suerte de Jin Young justo en su punto sensible. Acarició un poco la zona afectada soltando un gemido de dolor al sentir sus propios dedos. Aquello era una mala idea.

Abrió el grifo y mojo su rostro para tratar de despertar lo antes posible. No había dormido nada y debía ir a trabajar. Su rutina de cada día.

Su chofer lo esperaba afuera el cual lo recibió con una gran sonrisa la que claramente Jin Young ignoró y simplemente se subió al auto y empezó su recorrido.

Con café en mano y el prototipo del nuevo tomo de la revista bajo su hombro caminó por el pasillo entrando en la sala común donde todo el mundo miró a su dirección apenas este puso un pie en el lugar. Solo basto una seria mirada para que todos volvieran a lo suyo.

Cerró la puerta con brusquedad provocando que esta se cerrara en un portazo, lo cual no era nuevo en ese lugar.

Bang Chan no mentía cuando lo criticaba y Woojin tampoco. Si las personas creían que las condiciones de trabajo en la revista Vogue era mala, la de DAZED le ganaba.

Dejó el prototipo en la mesa junto a su café para masajear un poco la zona lastimada la cual ya no dolían ante el contacto gracias a los analgésicos que ya estaban haciendo efecto en su sistema.

Una extraña hoja de colores llamó su atención. No recordaba haberla dejado el día anterior y que supiera su asistente no le había notificado de alguna entrega o informe que deba corregir. Dejó de masajear su mandíbula para acercarse a aquella hoja y tomarla para luego acercarla a su rostro.

—Maldito imbécil —dijo entre dientes al leer las letras de colores muy bien decoradas que decían: ESTAS CORDIALMENTE INVITADO A LA PAZARELA ANUAL.

Con la sangre hirviendo la rompió en miles de pedazos para luego arrojar los pedazos al aire levantándose de su silla furioso.

—Me las va a pagar.


—¡Respondió! —gritó Jeong In al ver como la bandeja de entrada del correo marcaba que había recibido respuesta de la cantante Kesha la cual había solicitado para que interpretara una de sus canciones en la pasarela.

—¡¿Y qué dijo?! —respondió Bang Chan bajando a toda velocidad por las escaleras para llegar a su lado.

Jeong In leyó con dedicación la corta respuesta de su parte suspirando.

—Dijo que no podría ya que está muy ocupada trabajando en su nuevo álbum, pero que agradece la oferta —leyó las últimas líneas y recupero la sonrisa que había borrado —Pero nos da la autorización de usar su canción para la pasarela interpretada por otras personas que nosotros escojamos.

—Algo es algo ¿no? —se unió Woojin.

—Eso es verdad —siguió Jeong In tratando de animar a Bang Chan quien miraba no muy a gusto por la respuesta.

—Okey, esto será un problema para después ¿Qué sigue en la lista?

—Nada.

—¿Nada? —lo miró extrañado —¿Cómo que nada?

—Ya acabamos con todo, los diseños fueron mandados a producción, los modelos ya están esperando las prendas para hacerles la prueba de vestuario que será mañana y Seung Min junto a Felix se encuentran en el lugar donde será la pasarela con el servicio de decoración arreglando el lugar. Prácticamente terminamos, solo faltan los detalles que podremos empezar a arreglar mañana cuando lleguen nuestros pedidos.

Vogue Life || Stray KidsWhere stories live. Discover now