ASUNTO DE DOS [Kacchako]

•LA HISTORIA PERFECTA

Ochaco se había quedado sin habla, su cerebro no pudo procesar lo que acababa de oír. Sus labios se abrían y cerraban queriendo formular una frase coherente, mas, era casi imposible.

Los intensos ojos rojizos de Bakugou seguían acechándola y sus brazos la mantenían cautiva con solo estar a cada uno de sus costados sin siquiera tocarla.

La cara de la jovencita ardió con fuerza y apenas pudo decir algo.

—¿Uh?

—Ya oíste, que serás mi novia.

Un empujón directo al pecho de Bakugou fue lo siguiente y con la vergüenza inundando a Uraraka, sin darse cuenta activó su quirk, lo que ocasionó que el muchacho se elevara perdiendo su gravedad.

—¡Uraraka! ¡Maldita sea contigo! ¡Bájame!

Pudo haber actuado rápido y bajarlo de allí pero se negó a hacerlo y lo mantuvo flotando en el aire al tiempo que le ardían las mejillas. El rubio movía los brazos como queriendo sostenerse de algo para tocar el suelo, no obstante nada servía. La peculiaridad de Ochaco era terrorífica si la usaba contra la voluntad de alguien.

—¡URARAKA!

—¡No te bajaré hasta que te retractes de lo que acabas de decir!

Bakugou involuntariamente empezó a girar en el aire de forma paulatina, eso lo desesperó.

—¡Es mentira!

—¡Júralo!

—¡Por un demonio cara de pelota! ¡No quiero que seas mi novia de verdad, solo quiero que lo finjas!

—¿Cara de pelota?

Uraraka se consternó y posteriormente bufó furiosa, Bakugou era horrible poniendo apodos y ése había sido el peor. Inconscientemente se llevó las manos a sus mejillas para palpar la forma de su rostro.

—¿Escuchaste lo que te dije? —Preguntó él mientras pataleaba.

—¡No tengo cara de...!

—¡Hablo de que no quiero que seamos novios! ¡Te necesito para ganar un concurso!

Sin estar muy segura de hacerlo, Ochaco juntó sus manos y desactivó su habilidad ocasionando que Katsuki cayera de sopetón al piso. Eso lo irritó bastante.

—¿De qué concurso hablas?

Se levantó del suelo y se sacudió las manos, miró con el ceño fruncido a la castaña pero no le gritó, contuvo sus ganas de hacerlo porque sería inconveniente perder su última oportunidad.

—¿No has visto en internet el concurso de Mrs. Lovely?

—No tengo internet. —replicó la chica, Bakugou chistó.

—Lo que sea, el punto es que es un concurso que tiene como premio un viaje pagado al Monte Fuji y eso incluye el hospedaje y las comidas. El maldito problema es que solo pueden participar parejas de novios.