𝗜𝗡𝗙𝗘𝗥𝗧𝗜𝗟𝗘 › JK｡

unique.

si quien sea que lea esto encuentra un error, avise xfis, esto era un vmin que escribí hace un tiempito.
dedicado a mi sis vantepoesy luv u. uwu♡

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Sintió su respiración cortarse.

De repente, el ruido exterior de niños y adultos fuera del consultorio desapareció, su vista se volvió borrosa, todo permaneciendo en silencio, sintiendo únicamente los latidos de su corazón retumbando con un fuerte tum, tum, tum, tum en sus oídos.

Se llevó las manos al vientre, su labio inferior temblando al igual que su cuerpo, y en su mente resonaron las palabras dichas con anterioridad por el doctor, como burlándose de él.

Usted no puede tener hijos.

No puede tener hijos.

No puede tener.

No hijos.

El tic tac constante del reloj en forma de búho que colgaba de una de las blancas paredes del consultorio era lo único que se escuchaba, hasta que habló:

━N-no... ━su voz se cortó━. E-es una broma, ¿verdad? Debe ser una broma.

El joven hombre de bata blanca se quitó los lentes y suspiró.

El doctor Choi MinHo era uno de los más famosos ginecólogos en todo Seúl –además de ser un admirable Alfa, acostumbraba a tratar con distintos y de los más difíciles problemas, siendo reconocido por tener una solución para todo.  A muchos les sorprendía la gran capacidad así como la fama que había logrado el hombre a tan corta edad. Por supuesto no faltaban los escépticos que tomaban su trabajo como una farsa, puras mentiras.

"Jodidos envidiosos" los clasificaría su asistente, y prometido, TaeMin, refunfuñando y cruzado de brazos, molesto por las críticas hacia su pareja.

En cambio él se acercaría al pequeño Beta y lo calmaría como sólo él podría hacerlo, porque claro, su pareja era tan especial que no dejaría que nadie más se le acercara, y tampoco sería tan dócil con alguien que no fuera su Alfa.

Y eso no podía más que alegrarlos a ambos, tanto a Alfa como a Beta.

━P-por favor, doctor, d-debe haber una equivocación, y-yo no p-puedo...

MinHo salió de sus pensamientos al escuchar el sollozo y fijó la mirada en el joven de cabellos oscuros frente a él, la pena y lástima plantadas en su rostro. Podía entender a la perfección lo que pasaba por la mente del chico; debía estar destrozado, sintiendo su vida acabada.

Y así era.

Porque, lamentablemente en el mundo moderno, un Omega incapaz de dar hijos era considerado como un Omega inútil.

Los Omegas infértiles no eran comunes, rara vez se encontraba a alguno con esta condición, pero los pocos que había solían ser excluidos, tachados de inservibles, terminando la mayoría de estos muriendo por soledad al no ser aceptados y constantemente rechazados –especialmente por los Alfas– o, en todo caso, suicidándose al enterarse de su condición.