Cap. 42

1.6K 65 0
                                    

Pov's Andrea

Me arreglo la ropa, mirándome en el espejo, esta niña si que tiene estilo

-¿Te gusta? - me pregunta nerviosa - si no te gusta podemos ir a cambiarla - juega con sus manos y le sonrío ampliamente - yo la cogí por que me gustaba pero si no te gusta

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

-¿Te gusta? - me pregunta nerviosa - si no te gusta podemos ir a cambiarla - juega con sus manos y le sonrío ampliamente - yo la cogí por que me gustaba pero si no te gusta

-Me encanta, no te preocupes - digo y suspira de alivio

-Creo que deberíamos bajar, falta que conozcas gente - sonríe y asiento, insegura - no te harán nada mientras yo esté contigo - me tranquiliza y le abrazo ¿Que por que? Porque me transmite tranquilidad

Bajamos y encontramos a alrededor de 15 personas en la gran cocina, sentados alrededor de la mesa, charlando

-¿Le gustó? - cuestiona una mujer de unos 45 o por ahí sonriendo mientras cocina

-Sí, mami, le encantó - sonríe mirándome

-Me alegro - se acerca a mí - encantada bonita, soy Heisa, la madre de estos hombres que se comportan como niños - dice mirando a todos, quienes tienen la cabeza baja - ¿Te hicieron daño? - niego - más les vale...

Me hacen sentarme, tomo asiento entre James y otro muchacho, idéntico a Stephanie, diría que es su gemelo

-Hola, soy Robert - dice el chico sonriendo, sonrío de lado y nos ponen los platos en la mesa. No tengo apetito, pues hemos comido hamburguesa, pero huele tan bien y tiene una pinta, que me lo como sin rechistar, observando a todos

James posiciona su mano en mi muslo y lo apreta, me pregunta con la mirada, preocupada y solo asiento. Acabamos la comida y para escapar, veo a Stephanie fregando, me acerco

-¿Puedo ayudarte?

-Tranquila, puedo sola - sonríe

-Por favor, tengo miedo allí sola - digo y mira los platos

-Cierto... Bien, no te separes de mí - dice y la ayudo a fregar

Al acabar vamos al salón y nos sentamos en el sofá mientras hablan entre ellos

-No me gusta lo que hacen - dice y la miro - James, Robert y Felipe no quieren estar ahí - me mira - pero los matarían si no lo hacen

-¿Porque? - pregunto

-La mafia es así, por suerte para mí, no puedo participar en ella por ser la menor de todas - sonríe de lado y vuelve su vista a su telefono

-Una cosita de nada... - me mira a los ojos - yo se supone que mañana trabajo... Aquí no tengo nada y no sé cuanto estaré, necesitaría mi teléfono para poder excusarme de estar enferma o algo - digo con timidez

-Ah ok... - se levanta y la miro, va a donde su padre y habla, me señala y James me mira. Vuelve sonriendo y James y dos más se van - Arreglado, van a ir por algunas de tus pertenencias, móvil, cargador, algo de tu ropa... Cosas básicas - resta importancia

-Muchas gracias, Stephanie - sonríe y me conduce hasta una habitación con solo una cama, dos puertas, un balcón, un sofá y una mesita frente una TV

-Aquí dormireis James y tú - dice señalando con las manos el cuarto - acomodate, si necesitas algo, la habitación de enfrente es la mía - sonríe y se va, cerrando la puerta

No sé cuánto voy a estar aquí, lo que sí estoy segura es que tengo a tres personas de momento de mi parte, Stephanie, James y su madre y me van a cuidar.

Me siento en la cama y enciendo la TV, me acerco al balcón y miro todo el territorio de los Fitzgerald. Una enorme piscina, una gran explanada, un parque infantil, mesas de picnic... Todo es bonito... Pero algo no deja de resonar en mi cabeza... El abuelo tenía razón

La boxeadora Where stories live. Discover now