Lo intentaste.

1.2K 72 33
                                    

Les recomiendo escuchar algo de música que emocional (algo triste o relajante para una mejor experiencia). ;y/

Toriel hablaba mientras conducía, de lo poco que faltaba para la posible visita de Asriel, pero Kris no parecía prestar mucha atención, pues la noche anterior tuvo pesadillas, no sus "terrores nocturnos", pesadillas de verdad, un ser que solo dejaba ver su cara sonriente y manos de color blanco, parecía que trataba de decirle algo, pero no lo comprendía, un líquido negro comenzaba a brotar de sus ojos nariz y boca incontrolablemente, podía tener una sensación de agonía, el líquido negro comenzaba a acumularse y subía de poco a poco hasta que lo cubrió por completo dándole una sensación de que se ahogaba, lo que lo indujo a despertar de golpe en busca de aire.

—¿Sucede algo mi niño?

La pregunta lo saco de ese recuerdo y con la misma negó en silencio, Toriel ya se estaba estacionando frente a la escuela.

Muy bien, en caso de que no te sientas bien otra vez ve a verme cariño.— En cuanto quiso tomar la mano a su hijo adoptivo este se negó, lo cual le sorprendió. —Oh esta vez no, está bien, entiendo...

Lo siento mamá, es solo que...

No, está bien mi niño, creo que tenía que pasar tarde o temprano... Me siento triste y contenta a la vez, estás creciendo...— Su voz se notaba algo temblorosa.

Kris se sintió algo avergonzado por la actitud de madre a su vez también algo de culpa, pues ella casí se ponía a llorar.
Mamá...

—¿Sí mi ni...?— Aclaró su garganta y comenzó de nuevo. —¿Sí Kris?

Podemos tomarnos las manos por última vez, claro sí es que quieres...

Los ojos de la mujer se iluminaron y tomó de la mano a su hijo, para así ambos entrar en la escuela y despedirse con un cálido abrazo, por consiguiente cada uno fue a sus respectivos salones. Justo cuando el chico estaba por girar la perilla un fuerte golpe en el hombro lo hizo saltar del susto y el dolor.

Igual te lo tienes merecido, ja ja.

Kris volteó a ver a Susie, la cual mostraba una sonrisa burlona, solo pudo sobarse el hombro en silencio y entró sin decir nada seguido de ella.
Todos, con excepción de Berdly quien había faltado, en el salón voltearon a verlos y su sorpresa por verlos llegar juntos que comenzaron a hablar bajo entre ellos dejando un silencio incómodo  para ambos, eso hasta que Alphys llegó para dar la clase.
El día pasaba sin pena ni gloria hasta que la campana de la hora de descanso sonó, Kris, Susie y Noelle fueron de los últimos en salir.

—¿Kris, Susie...?— Noelle llamó la atención de ambos, los cuales solo le miraron extrañados.

¿Qué?— Respondió la chica púrpura en seco.

He notado qué, desde que se saltaron las clases hace unos días han estado pasando mucho tiempo juntos y... Me preguntaba sí... ¿Ustedes estan sali...?— Susie le interrumpío.

Se le notaban las mejillas de un tono más obscuro pues se había sonrojado por lo que la rubia estaba por preguntar. —¡N-No!, Es por el trabajo en equipo y.... ¡Solo nos estamos organizando!, ¿Verdad Kris?—

El chico solo asintió con algo de confusión sin saber de que hablaban, pues en ese momento la mente de Kris se encontraba en otro mundo.

Oh... Ya, esta bien entiendo, quizá solo fue cosa mía. Lo siento.— La rubia se disculpó por sacar conclusiones apresuradas ante el comportamiento de sus compañeros en los últimos días.

Nuestro Secreto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora