Capítulo 13.

58 9 16
                                    

"Déjame decir que yo solo no creo en el amor".



POV HANNAH

JungKook resopló, pasando una mano por su perfecto cabello castaño obscuro lacio.

—Eres muy mala mentirosa.


Por supuesto que sí. Quiero decir, eres sexy como el infierno, pero no quiero alimentar tu ego más así que no voy a admitirlo.

—No había mentido tanto en mi vida hasta que te conocí —pensé en voz alta.

—¿Y por qué es eso? —preguntó con curiosidad mientras subíamos las escaleras de la estación y nos encontramos con la calle de nuevo. Me había perdido la luz de fondo natural en ese agujero.

—Bueno, vamos a ver —fingí estar pensando mucho y empecé a contar con los dedos— Le mentí a mis padres cuando me dijo que no vendría a Bronx nunca más, mentí cuando le prometí a mi hermano que nunca hablaría contigo de nuevo, mentí a mi novio cuando le dije que eras mi primo, mentí a mis padres ese día también cuando les dije que estaba con una vieja amiga... —callé, pensando más posibles mentiras que había dicho en las últimas semanas—. Ah, y mentí a mi madre hoy, cuando le dije que iba con unas chicas que ni siquiera existen —terminé y miré a JungKook con una expresión que decía '¿ves?'.

—Wow —JungKook abrió la boca teatralmente arrastrando la 'o'— Eres una chica dura Hanns. Me sorprende que no te hayan pateado fuera todavía. ¿Qué clase de padres dejan que su hija sea tan rebelde? —sacudió la cabeza tratando de parecer totalmente en serio. Y aquí iba, burlándose de nuevo. Le envié una mirada y empecé a caminar más rápido en la dirección que íbamos—. Hmm, Hannah, ¿tienes alguna idea de a dónde vas? —su voz llegó desde unos pocos metros detrás de mí, por lo que me detuve y puse los ojos. Poco a poco me doy la vuelta.

-Es evidente que no —espeté— Pero ya estás burlándote de mí otra vez, cuando prometiste que no lo harías —hice hincapié en esa parte— No quiero pasar el rato contigo —hice un puchero como solía hacer cuando mis padres no querían comprarme una muñeca nueva cuando yo era pequeña y me volví de nuevo.

No había dado dos pasos antes de que JungKook estuviera de pie frente a mí impidiendo que camine. Traté de esquivarlo, pero si me movía hacia la izquierda él iba a la derecha, hacia como un espejo. Suspiré con fastidio y estaba a punto de dar la vuelta y caminar en la otra dirección - donde quiera que pudiera ir - cuando un par de manos fuertes se colocaron sobre mis hombros. Traté de zafarme de su agarre, pero él no se movió una pulgada.

—Vamos, deja de enojarte Hanns —suspiró— Siento haber roto mi promesa —puso los ojos en blanco— Pero es demasiado divertido meterse contigo, siempre te enfadas —una pequeña sonrisa se abrió paso por su rostro, terminando en una extraña risita. Mi cabeza estaba inclinada hacia un lado y mis ojos estaban entrecerrados, lo que demostraba que eso no estaba siendo divertido para mí. Luego se puso serio.


La gravedad murió cuando oímos un ruido sordo.

—Alguien tiene hambre —JungKook se echó a reír.

Llevé mis manos a mi estómago y retumbó de nuevo. ¿Por qué estas cosas vergonzosas siempre me pasan a mí?

—Sólo compremos algo para comer —dije, renunciando a mi rabieta. No sé cómo JungKook aún quiere estar conmigo porque, honestamente, siempre estoy actuando como una niña estúpida. Tengo que cambiar eso.

Él esbozó una sonrisa de complicidad que había ganado una vez más nuestra pequeña discusión.

—Vamos.


Lanzó su brazo alrededor de mi hombro y yo no podía dejar de sentirme incómoda. Yo no voy por ahí haciendo eso con cada chico que conozco, pero para JungKook parecía como si no fuera gran cosa, así que lo dejé pasar. Era una especie de cómoda.

B.R.O.N.X  |Jjk;| AdaptadaWhere stories live. Discover now