Capítulo 10: Ashton

1.4K 185 33
                                    

Algo cambió dentro de mí. No, algo había cambiado en mí desde hace semanas. Había estado casi todos los días junto a Madison, alejándome a cada segundo más de mi familia. Me hacía sentir como una mierda, pero comenzaba a sentirme libre a su alrededor, comenzaba a sonreír más, mi cuerpo dejaba de estar tan tenso todo el tiempo. Ella me hacía reír cuando menos me lo esperaba. Ella había traído la energía que necesitaba en mi vida, ella me distraía de mis problemas, me ayudaba de un modo que no creí posible. Había comenzado a disfrutar nuevamente lo que hacía, disfrutar de lo que planeaba dedicarme el resto de mi vida. Incluso el hockey había dejado de parecerme divertido en algún momento y temí perder el interés, pero Madison estuvo allí con su alma tan brillante como el jodido sol. Mierda. Me encantaba estar a su alrededor, ver esas tan extrañas sonrisas sinceras en sus labios siempre pintados de suaves colores. Y, contra todo pronóstico, había pensado más veces de las que quisiera en besar esos labios, había pensado en ella más veces de las que hubiese admitido en voz alta. 


Me gustaba Madison, era refrescante estar a su alrededor y no tener que pensar dos veces las cosas antes de decirlas. Me gustaba estar a su alrededor, me gustaba ver su rostro cada vez que podía. La había llamado a través de video llamadas más veces de las que estaba dispuesto a admitir. Madison me hacía sentir como yo mismo. En algún momento me había perdido a mí mismo y ella me había traído de vuelto a la Tierra con esos ojos asustados aquel día en el TD Garden. Maddie me dejaba ser yo mismo, aunque la mayor parte del tiempo fuese un idiota.


Por otro lado, mi enojo con Matt y Grace había ido desintegrándose día a día, no me sentía enojado o furioso con ellos, nada más me sentía nostálgico por el amor que ellos compartían y que yo tanto ansiaba. El amor que existía entre ellos era algo que yo deseaba sentir alguna vez en la vida, porque era el tipo de amor que sabías que duraría para siempre, incluso si existían peleas, incluso si habían serias dificultades, ese tipo de amor siempre saldría a flote. 


Descubrí que, a pesar de gustarme Grace, ya no estaba loco por ella. Grace no era la primera persona que venía a mi cabeza cuando me despertaba por las mañanas, no era la última persona en la que pensaba antes de dormirme. No cuando le daba las buenas noches todas las noches sin falta a Madison. No cuando le hablaba temprano por las mañanas deseándole un buen día. Mierda, esa chica se había metido bajo mi piel y no me había dado cuenta siquiera. 


Ahora solo estaba siendo un cretino con mi hermano mayor y su novia. Apestaba como hermano y como amigo. Maldita sea. 


—Sí estaba enamorado de Grace. – Admití cuando alejé mi mano de su suave rostro, alejando mi mirada de la suya. Avergonzado. Mierda. 


—Lo sé. 


—Sabelotodo. – Suspiré. – Lo digo en serio, he sido un idiota con ella y Matt. 


—Espera, ¿lo has dicho en tiempo pasado? – La miré confundido. 


—No creo estar más enamorado de ella, Mad. Jesús, me volví loco cuando ellos dijeron que estaban juntos, pero ahora... Ahora entiendo por qué están juntos, entiendo por qué se aman tanto. Entiendo todo. Y estaba tan malditamente celoso de ellos, de su relación. Estaba tan celoso de mi hermano, Maddie. En realidad, sigo jodidamente celoso de lo que ellos tienen. No había podido sacar mi cabeza de mi propio culo por un tiempo, hasta ahora.


—Lo sé. Estabas siendo un poco tóxico ahí, ¿sabes? Ellos han estado muy preocupados por ti, sé que Grace teme perder a su mejor amigo. 


Se me revolvió el estómago al pensar en eso. 


—Temo perderla también, ¿sabes? – Mad asintió solemnemente. 


Sabía que hablaba con Grace por mensajes, que se llamaban de vez en cuando y que en serio ambas estaban preocupadas por mí, pero no podía evitar ser un imbécil cuando había estado sintiendo que me habían arrebatado a Grace de entre mis manos, incluso si ella nunca había sido mía. Grace era mi mejor amiga. No quería perderla por estar comportándome como un imbécil celoso. 

Aprendiendo lo que es el Amor (Amor en Boston #2)Where stories live. Discover now