𝑭𝒐𝒓𝒕𝒖𝒏𝒆'𝒔 𝑭𝒐𝒐𝒍 || ❝ The Closer You Look, The Less You'll See ❞
Cuando mi madre estaba viva, la magia era la única cuerda que nos mantenía a ella y a mí juntas. Los trucos tontos de cartas; incluso sacar un conejo de la chistera. Todo me...
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Teniendo en cuenta que solo le había conseguido a Chaqueta de Cuero unos minutos de tiempo, supuse que no podía haber ido muy lejos. Ahora solo era cuestión de saber a dónde había ido. Supuse que iría a algún lugar apartado y tranquilo, donde no hubiera mucha gente. El único lugar así cerca era la playa junto al puente de Brooklyn.
Después de abrirme paso entre la multitud de turistas que esperan para subir a bordo de un ferry, me imagino que empezaré por ahí. Es martes y son las 4 de la tarde, así que seguro que hay poca gente por allí. Jugueteando con el reloj que llevo en la mano, me dirijo a la entrada que está a pocos metros de la zona de embarque del ferry y piso el sendero rocoso.
No tardé mucho en descubrirlo, dada la chaqueta de cuero. Está sentado en una gran roca con vistas al agua, revolviendo el dinero en la cartera negra que había robado. Como predije, es uno de los pocos que están allí, aparte de una mujer que pasea a su perro y un hombre y un niño que juegan con las rocas cerca del agua. Empiezo a acercarme a la roca en la que está sentado, esbozando una pequeña sonrisa.
—Buen truco —le llamo, haciendo que se gire para mirarme. Rápidamente cierra la cartera y la mete en el bolsillo de su chaqueta, mirándome con las cejas levantadas. Ver a Chaqueta de Cuero desde la distancia en ese ferry fue definitivamente algo... pero ahora tengo la oportunidad de verlo más de cerca. Pelo castaño oscuro, piel bronceada, cejas gruesas y ojos marrones profundos, lo tenía todo.
Me abro paso junto a la gran roca mientras Chaqueta de Cuero se burla ligeramente, dirigiendo su mirada hacia el agua.
—¿Lo viste? —pregunta él, dejando caer la cabeza hacia su regazo y luego hacia mí—. No fue mi mejor momento.
—Bueno, yo no diría eso —digo, cruzando los brazos sobre mi pecho—. Me pareció bastante bueno. Tu gran final me hizo levantarme de mi asiento.
La cara de Chaqueta de Cuero cae cuando empiezo a sonreír, dejando escapar un gran suspiro.
—Ya, quiero decir, creo que todo el mundo se levantó de su asiento cuando ese capullo reveló mi truco —dice, aunque noto el ligero nerviosismo que irradia de él.
