Diecisiete

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Era hora de que Jimin se fuera a trabajar y Jungkook no estaba muy contento, pues vería a Taehyung, Confiaba en él, pero no confiaba en el otro.

-No tienes que ir, diamante...- insistió el ojiverde.

-Ya, Jungkook... no me convencerás- río.

-¿Seguro?

Le preguntó mientras se acercaba a él para besarle suavemente el cuello algo que a Jimin le causó cosquillas haciéndolo reír.

-Seguro.- se alejó de él para mirarle- puedes venir a buscarme cuando salga y... podemos ver una película.- le miro travieso.

-Bien.- respondió desganado sin entender la referencia de su marido.

-Quita esa cara de bulldog, no trabajaré hasta tarde.

Él no dijo nada, solo se quedó serio. Jimin se subió a la cama para tomar su rostro y plantarle un beso, Jeon no se resistió y se lo devolvió, saboreó sus dulces labios y volvió a sentir las mariposas en su estomago.

¿Cómo es que había sido capaz de engañar a su marido?

Ni él mismo lo sabía, solo llego Yoongi, le movió el trasero y cayó rendido, ahora que lo pensaba bien, el pelirojo era egoista, engreído, superficial y materialista. Mientras que Jimin jamás a sido todo eso.

-Te amo- soltó sorprendiendo al más bajo.

-Yo te amo más- le sonrió.

Jimin se bajo de la cama, se puso sus zapatillas, tomó las llaves de su auto y salio de la casa, aunque no antes de darle un último beso a su esposo.

Entró a la cafetería y saludó a todo el personal incluyendo a Taehyung .

-Te ves radiante hoy.- le dijo Tae.

-Gracias... hoy he arreglado las cosas con mi esposo, creo que todo irá de maravillas de hoy en adelante.

Aquellas palabras le rompieron el corazón en mil pedazos a Taehyung , no podía ser tan obvio y ponerse a llorar enfrente de él, así que solo se limitó a sonreir y seguir dibujando los cafés.

Se sintió idiota al pensar que alguien como Jimin se fijaría en él, un simple chico que dibujaba en el café y ganaba salario mínimo, además de aun ser el bebé de su abuela a sus veintiséis años. Una lagrima rebelde rodó por sus mejillas. La limpio rápidamente antes de que Jimin lo viera e hiciera mas el ridículo.

-¿Estás bien?- le pregunto Park a su compañero.

S-si perfectamente bien ¿por qué no lo estaría?

-Te ves triste...- le dijo mientras acariciaba su espalda.

-No hagas eso, me siento incomodo.

-Lo lamento- habló apenado- cambia la cara.

Fue la ultima palabra que hubo entre los dos, ambos atendieron su por lado y no se hablaron, Jimin lo intento, pero esté solo lo evitaba, pues no quería seguir ilusionándose.

Ya había llegado la hora de retirarse y Taehyung ni siquiera se despidió de él, se sintió mal pero solo asumió que había tenido un mal día y esperaba que no haya sido por su culpa.

Salió del local y se encontró con Jungkook apoyado en su auto cubriéndose con un gorro y gafas. Se acerco a él y le saludo con un beso.

-Acabas de besar al próximo pennywise.- dijo contento.

-¿Definitivamente te han dado el papel?- preguntó emocionado- ¡Eso es increíble, amor!

Volvió a besarlo enamorado.

-Te extrañé.- admitió Jeon

-Jungkook....solo estuve fuera ocho horas...- río.

-No importa, te extrañé.

El mas bajo río y lo abrazo.

Tae observaba todo desde lejos con los ojos empañados, había perdido al chico y eso le rompía el corazón.

Broken Heart- Kookmin#1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora