Sal de mí

4 0 0
                                    

A años luz de ti, con deudas que decidieron ser olvidadas, promesas que se lanzaron al lugar más profundo del océano, recuerdos que fueron guardados en la Caja de Pandora con la única regla de jamás volver a abrir, con mariposas que quedaron sin flores donde posarse, sueños que jamás se cumplieron, pero se los enterró en el baúl de las cosas que ya no deseo, con todas las murallas entre un seguro <no sucederá> y un posible todo <puede pasar> pero aun así los lazos invisibles que me unían a ti seguían casi intactos a pesar de ya no estar unidos física y emocionalmente en nada.

Estás tan cerca de mí, aunque te hayas ido lejos. Nos despedimos hace tanto tiempo, que sería absurdo decir que aún echo de menos tu aroma o tú sonrisa. Pero a pesar de todo aquello que sentí y siento, confieso que no te quiero de vuelta, no quiero volver a rozar tus labios, no quiero tenerte tan cerca nunca más.

No te odio ni te quiero, no te olvido completamente ni te recuerdo con exactitud, no te huyo ni te busco, no te sueño ni dejo de tenerte en mis peores pesadillas, no anhelo tus besos ni declaro fruta prohibida tus labios, sencillamente quiero que salgas de mí, que así como te fuiste de manera física te vayas de todos mis pensamientos, sentimientos y suspiros.

Aunque te encuentro en cada sonrisa melancólica con fragancia a paz, en cada mirada perdida con deseos de encontrar la salida, en cada anhelo roto luchando por repararse, en cada promesa a la mitad naufragando lentamente en el olvido, en cada canción que tiene como protagonistas principales al amor y al dolor. Por favor, solo sal de mí, conviértete en espuma de este mar que quedó desértico luego del caos que provocaste, deja existir en lo que soy ahora, porque no soy ni la mitad de lo que fui un día contigo, porque de ser la fuente de los deseos terminé como un lago seco y olvidado, deja de dar señales falsas donde avivas mis esperanzas y termino mucho más herida que antes.

Sal de mí, de lo poco que quedó de este corazón asustado, porque me dejaste caer, pero seguí creyendo que tu mano me iba a salvar, me cortaste las alas, pero creí que en tus alas iba a volar, me congelaste el corazón, pero seguí creyendo que tu calor lo iba a abrigar. Mientras yo sucumbía en un sentimiento honesto y futurista, tú apagabas el fuego que alimentaba mi esperanza, pero a pesar de aquellas señales evidentes y claras, decidí ver solo lo que mi corazón deseaba ver y negar todo lo que mi corazón quería negar, por eso no eres culpable y me hago totalmente responsable de mi estado emocional porque decidí volverme ciega en un mundo lleno de luz.

Sal de cada abrazo que no puedo dar por esperarte y de aquellos que doy pensando en ti, de cada sueño realizado que no quiero compartirte, pero me imagino tú rostro celebrando junto a mí, sal de mí piel, donde me dibujaste paisajes con los dedos y ahora no tengo lienzo donde volverme a reescribir.

Sal de cada historia que ya no quiero contarte y terminas siendo el protagonista principal, como héroe o antagonista, sal de las maletas que he alistado para reinventarme o renacer y tu sombra se alista como compañera de viaje.
Sal de cada insomnio que ya no quiero dedicarte, donde invento historias de felicidad, pero donde apareces y cambias todo de la historia y termina siendo una epopeya de melancolía, de cada frase graciosa que oculta tu nombre y lo disfraza con sonrisas.

No estás presente, pero te mantienes en estado latente, esperando cualquier debilidad para que yo vuelva a dudar, no eres parte de mi realidad, pero te consideré los dados que me iban a hacer el cielo ganar.

Sal de este corazón donde ya no eres bienvenido, sal de esta historia que ya no tiene tu nombre, que ha introducido nuevos personajes, que ha dado giros argumentales inesperados, que promete un futuro lleno de estrellas, porque eres como un ancla que no me permite navegar aquellas aguas peligrosas donde voy sola, pero arrastrando tu sombra.

Sal del lugar que abandonaste un día, donde dejaste escombros en el lugar que antes habían paisajes, donde dejaste raíces muertas de lo que antes eran flores. Sal de mis bolsillos porque no pienso llevarte más conmigo, eres una carga demasiado grande y no pienso perder oportunidades presentes por mantenerme viviendo en el pasado.

He decidido reconstruirme y tu recuerdo (aquel que me atormenta y alimenta falsas promesas) no está entre mis planes. Sal de aquella manzana que me incita a morderla y márchate lejos de mi mente, ya no me hagas más daño, no ahora que ya no estás.

Sal de mis últimas palabras de despedida, porque ha llegado el día en el que por fin he decidido soltarte y es ahora o nunca el momento para decir el adiós definitivo.

Sal de lo poco que queda de mí, porque no quiero ser más parte de ti.

27-junio-19
Silvia Robles

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Nov 08, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Sal de míWhere stories live. Discover now