Prólogo

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Todos pensamos que no existía tesis alguna que pudiera destruir ciudades a un ritmo tan desenfrenado, que no existían tesis para quemar naciones enteras, que no había gráficos o presentaciones de PowerPoint, pero entonces ellos simplemente hicieron esta mierda y construyeron sus propias bombas.

Un himno más fuera de tono que dejaba que tus dientes se hundieran. Sueños americanos destruidos por ambiciones internacionales. Ellos estaban enfermos y tú estabas equivocado al respecto. Ellos eran personas con delirio de grandeza y tú te hundías en sus deseos como una bomba suicida hasta que tu respiración se detuviese.

En un mundo lleno de la palabra sí, estoy aquí para gritar. Hermanos de sangre desesperados, un juramento de silencio por la voz de nuestra generación. Necesitas bajar tus estándares porque nunca es cada vez mejor que esto. Ahora somos cenizas profesionales de rosas.

Donde quiera que vaya los problemas parecen seguirme. ¿Cómo llegué a ser sólo yo?

Soy un torbellino cargado de emociones, cualquier problema podría quebrarme o hacerme más fuerte. Como si fuera el último chico que todavía pelea, que todavía cree. Defendiendo la fe puedo hacer que el sudor ruede hacia atrás y tu corazón lata al revés porque mis agallas no pueden ser reembolsadas.

Sí, mi amor es un arma y no hay dudas cuando digo que es una granada. Puedes sacar alfileres de él y decir que todos luchamos envejeciendo en las esperanzas de unos minutos más para entrar en la lista de San Pedro.

Tú estás tan solo como una pequeña iglesia blanca en medio del desierto, quemándote. Pero tomaré el corazón que me ofreciste y cantaré una amarga canción porque soy la versión más solitaria de ti, simplemente no sé en qué me equivoqué.

Ve chico, ve y corre por tu vida.

¿Estás listo para otro mal poema?

- Frank Iero.


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Publicado el 12/11/2019

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