Storm

Capítulo cuatro

Me encuentro aún sentada en la cafetería con Faith, mientras compruebo que lo que ella me decía del café es completamente cierto, creo que me enamoré de este café. La pelinegra me estaba platicando de su familia y de cómo llego a ser hermana de Ranger.

—Mi papá se casó con la mama de Ranger cuando yo tenía diez.

—¿Y tú madre? — me atrevo a preguntar.

—Ella murió en un accidente de tránsito. Íbamos los cuatro en el auto, pero como ella iba manejando fue la que salió afectada.

—¿Cuatro?

—Oh si, mi hermana, ella sobrevivió también, pero tuvo heridas muy graves. Ella se quedó con mi tía y no la he vuelto a ver desde entonces.

—Lo siento— murmuro.

—Está bien, tranquila.

—Ya veo porque no tenías ganas de salir conmigo— una voz ajena se entromete en la conversación. Volteo con desinterés y veo a Noah a escasos metros de mi.

—Si, ya tenía planes— dice Faith con molestia.—Mejor nos vamos.

Asiento.

—Haz, espera— Noah me toma del brazo y me voltea hasta quedar frente a él. Miro a Faith quien me da una mirada de pocos amigos, asiento haciéndole saber que está bien.

—Te espero afuera— masculla la pelinegra mientras se aleja.

—Sé que no tengo buena fama, y se que posiblemente Faith te hable barbaridades de mi— hace una pausa y suspira con pesadez—. Y sé que acabas de llegar y no me conoces en lo absoluto— se muerde la parte inferior de el labio—. Pero me atraes Haz...

—¿Ah?— logro gesticular.

—Me llamas bastante la atención y quisiera conocerte más, si eso está bien para ti.

—No rengo ningún problema en conocernos nada más— digo haciendo una mueca de desagrado. Me parece bastante gracioso que crea que va a poder jugar conmigo.

—¿Eso significa que yo también te atraigo?

—No, significa que no tengo problema en hablar como personas normales— dije con falso interés.

El semblante de Noah cayó con incredulidad y yo le di la sonrisa más amable que pude esbozar.

—Bueno, te veo luego— me da un beso en la mejilla y se aleja despidiéndose con la mano.

Ruedo los ojos con disgusto.

Volteo hacia el mostrador y me encuentro con Ranger viéndome fijamente y otra vez, no logro detectar nada en su mirada ¡Qué habilidad!

Salgo del local y me encuentro a Faith mirándome con decepción.

—¿Te dijo que le gustas no?

— Si, pero..

—Solo ten cuidado Haz, si eres feliz está bien por mí. Pero por favor, no dejes que juegue contigo.

Río sin gracia.

—Me lástima que creas que soy tan incrédula Faith, le dije que podíamos ser amigos y si en tal caso él quiere jugar, entonces vamos a jugar.

Faith me dio una mirada asustada mientras yo sonreía con malicia.

—Tengo un presentimiento de que eres cruel Hazel.

—No es crueldad, es mero entretenimiento.— dije. 

***

7:35 am

Ha pasado una semana desde que entré al nuevo instituto y es la tercera vez que llego tarde a mis clases, mis pulmones arden y el aire me falta por el esfuerzo que me encuentro haciendo, voy a toda velocidad por el pasillo. Me dirijo a la clase del Señor Hadwin y con lo poco que conozco de él, mi intuición me dice que no me va a dejar entrar, pero no me cuesta nada intentarlo.

Cuando estoy llegando veo como Ranger está saliendo del salón, supongo que porque lo regañaron. Me acerco a paso apurado y con la respiración entrecortada.

Definitivamente necesito hacer más ejercicio.

—Ni siquiera lo intente señorita Storm, hágale compañía al Señor Thompson y fuera de mi vista.

Bufo indignada.

Veo como Ranger se va alejando y corro hasta llegar a su lado.

—¿Por qué te sacaron?

—No es tú problema.

—Dime.

—No.

—Amargado.

—Entrometida— bufo.

—¿Porque eres tan grosero?

—¿Porque tú finges que no lo eres?

—¿Qué?

—Podrás engañar a los demás Hazelnut, pero a mi no. Te he visto, he visto como haces muecas cuando te abrazan, te he visto rodando los ojos cuando terminas de hablar con alguien, he visto la impotencia que se refleja en tus ojos cuando quieres responderle a alguien pero te controlas.¿Por qué lo haces?

Mierda

—No sé de que hablas

— Y lo veo en tus ojos, te brillan con rabia, veo que escondes algo más ¿Qué es lo que escondes Hazel?

—Y-yo...