Prefacio

22 3 0
                                    


Miedo. Recuerdo que cuando era pequeña, Michael solía apagar las luces del pasillo para hacer su voz de monstruo hasta que comenzaba a llorar, mama llegaba a consolarme y tratar de convencer a mi yo de seis años que los monstruos no existían. Pero si existen. Recuerdo que sentía que me ahogaba del miedo y que solo quería desaparecer, después me volví autosuficiente a una corta edad y los monstruos quedaron para los demás niños; pero ahora vuelvo a sentir esa sensación multiplicada por millones.

Miedo, pero no por mí. Miedo por el chico que amo, miedo por su vida, miedo por la verdad. Me cuesta respirar mientras escucho pasos acercarse, la manija de la puerta de metal comienza a moverse y trato de controlar mis ganas de llorar mientras me pregunto si de haber sabido que todo esto pasaría, ¿habría hecho las cosas diferentes?


Hola a todos los que leen, esta historia la escribí a partir de un sueño así que necesitaba escribirla en algún lado, siéntanse libres de comentar y compartirla con todos, espero les guste.

Besos.

Secretos en ojos azulesWhere stories live. Discover now